¡Así me dijo doña Mina al atenderme en la pulpe! La vi como asustado, escaneando alrededor en busca de su marido, figura omnipresente en la pulpe y la política del barrio. No se preocupe, me dijo, le dimos feriado hoy por ser Día del Padre.
¿Sabe?, me dijo, hoy se celebra el día de San José según el calendario católico, el papá del mero mero, por eso supongo que lo pusieron en esta fecha. Hoy tratamos por lo menos en mi familia de darle un día al viejo, le haremos una carnita más tarde y lo consentimos, me dijo con mirada de gata cazadora.
Los padres, me dijo, hay que consentirlos, aunque sea un poquito, bueno los de verdad, los que crían, no los que ponen, esos que trabajan para llevar el pan y esos que no solo son proveedores, la verdad muchos confunden me dijo, se matan trabajando los pobres, confirmo con mirada maternal, que pierden el norte, cambian la imagen de padre, por imagen de cajero automático, creen que con solo proveer y ya, pero la cosa es más complicada. La verdad lo admiro a mi viejo, por ejemplo, toda la vida ha pasado chamba y chamba, ha sido un buen padre, no lo culpo, con lo difícil que está la vida, si se deja de trabajar al mes nos han corrido de la casa y cortado hasta las ganas de vivir, remató muerta de risa. Cada día todo más caro y como padre responsable pasa alcanzado viendo cómo comemos y vivimos pues. Casi no les queda tiempo de nada. Pero, aun así, agarra tiempo, me dijo como en chisme, de sacar a los nietos como saco a los güirros ya hombres a caminar, bueno siempre que no sea oscuro y en lugares seguros, porque la delincuencia…
Sí claro, le respondí, pensando de dónde sacaría tiempo o si hablábamos del mismo pulpero, porque siempre lo veía allí. Ella, como sagaz que es por ser madre, mujer y esposa de un pulpero, me vio con sus ojos de gata cazadora, entre fuego y broma y como una tormenta de verano, atronadora y fresca, dijo orgullosa y aún le queda tiempo para pintar, hablar y reír con la familia, ese el secreto del padre, el hombre que tiene el equilibrio de dar no solo lo que el sudor de su frente da, si no que también su corazón da para su gente, para su descendencia y para todos los que dependen de él, eso es ser un padre, me dijo. Por eso le dimos feriado hoy, para que descanse, para halagarlo, porque de eso se trata la vida de esos momentos íntimos y felices, lo demás se va al carajo, de cuando uno ya esté descansando, los que quedan lo recuerden con amor y le enciendan una vela, terminó.
Yo sé que esta vida no es justa, que muchas personas no son así, que muchos hombres solo son irresponsables y otros no llegan a eso, al igual que muchas mujeres se fajan igual que ellos, pero hoy en especial celebramos a esos hombres, los que crían y los que engendran y crían también, aquí y en todos lados, los que aman, ríen, trabajan y cuidan de los suyos como es su obligación, calladitos y sin pedir nada a cambio, bueno, tal vez un felicidades papi tal vez eso pero nunca lo van a decir, jajaja, hoy es para los que están y también los que ya no, pero aún los recordamos, aún viven en el corazón de su familia, para ellos es este día, que Dios los bendiga siempre, hombres que Dios le dio la oportunidad de ser llamados padres.
Jesús Pavón
