35 C
Honduras
jueves, mayo 9, 2024

Ah los boleros

Yo, como casi todos los de mi generación, soy una amante de la música romántica, de los boleros, baladas y demás y si uno le pone un poquito de mente nos damos cuenta de que realmente se trata de música romántica; música llena de fantasía. Y me viene a la mente ese gran éxito del señorón José José: Amar y querer.
Demasiada gente se ha tomado a pecho los preceptos expuestos en esta melodía que, si bien es cierto, es muy bella, también manda un mensaje equivocado que, si uno se lo toma muy en serio, se la va a pasar muy mal.

Por ejemplo, eso de que “amar es sufrir”, uf, muchísima gente todavía hasta el día de hoy, se la cree, piensan que, si no están sufriendo en su relación amorosa, entonces algo está sucediendo, algo no va bien. Otros, tiene pavor de enamorarse porque “amar es sufrir”, precisamente.

Luego nos sigue diciendo la letra que el amor no conoce el final, otra gran equivocación. En este espacio hemos hablado sobre lo efímero de las emociones y que el amor, como un sentimiento que es, queda incluido entre estas sensaciones que pueden estar hoy y mañana ya no. También hemos explicado cómo todo se desarrolla en el cerebro, los procesos implicados y consecuencias. Pero, más que cualquier lectura al respecto, lo que más valioso que poseemos todos, es la experiencia. A todos nos ha pasado, estar súper “enganchados” de alguien en algún momento de nuestra vida, alguna vez hasta amamos de verdad con todo y lo que eso significa, pero hoy, ya no sentimos aquello, ha quedado completamente en el pasado y algunos casos hasta en el olvido lo cual significa que, el amor sí conoce el final.

Más adelante nos encontramos con la aseveración de que “el que ama pretende servir, no puede pensar y todo lo da.
Después, y esta parte me encanta, nos dice la letra de esta canción que el ser amado es total plenitud y cómo no, digo yo, ¡si el otro se tiene que dar por completo y está comprometido a no dejarlo de amar nunca!

Yo no tengo claro en qué cosas se basaban los autores de estas líricas, seguramente en vivencias personales, me parece que aquí se habla del enamoramiento o el amor sin compromiso y se le llama el “querer”.
Lo que sí, es que no tiene nada de particular declararse fan de estas canciones y disfrutarlas, el problema empieza cuando nos creemos estas letras, cuando las hacemos nuestras y hacemos de nuestra vida, una canción romántica, he ahí el problema.

Me parece que tenemos muchas cosas que desaprender para realmente estar bien con nosotros mismos y con las personas que nos rodean y una de estas cosas es la idea fantástica que todos tenemos del amor. Si continuamos con en pos de todas estas creencias vamos a seguir de tumbo en tumbo y echándole la culpa al amor y al otro, de lo que nos sucede. Nos hace falta una buena dosis de realismo y no es en la música donde la vamos a encontrar. Insisto, ella está para alegrarnos la vida, para calmarnos cuando lo necesitamos, es una gran herramienta para aliviar la ansiedad, pero debemos tener cuidado de lo que estamos escuchando e incorporando en nuestra mente.

Y hablando de realismo, pienso en aquella obra maestra de Joaquín Sabina “Contigo”. Pero esa lo dejaremos para otra columna, ¿está bien?

Emy James
Emy James
Emy James, psicóloga y Máster en Educación, escritora a nivel profesional. Trabaja en teatro y radio y es también docente.
- Publicidad -spot_img

Más en Opinión: