El especialista en información Alfons Cornella, acuñó el término ‘infoxicación’, un neologismo para aludir a la saturación de información. Día con día estamos expuestos a muchos datos, son tantas las fuentes a los que estamos conectados, redes, correo electrónico, libros, periódicos, televisión, internet en general, que simplemente olvidamos que la sobrecarga de datos puede llevarnos a una fatiga informativa.
El acrónimo de intoxicación por información puede provocar en ocasiones algunas alteraciones de comportamiento que repercuten en nuestras emociones, en nuestra salud en general. Es necesario que tomemos responsabilidad en medir la capacidad que tenemos para procesar esa enorme cantidad de datos. El psicólogo británico David Lewis, en los años noventa en su informe titulado “¿Muriendo por la información?”, dejó un aporte valioso, acuñó el cuadro clínico llamado Síndrome de fatiga por exceso de información, dicho síndrome no está considerado como tal, en el Manual Diagnóstico de los Trastornos Mentales, sin embargo, dicho psicólogo propone que el exceso de información puede provocarnos, la dificultad para tomar decisiones, fallos en la memoria, estrés, rasgos de ansiedad, dificultad para concentrarnos, alta dificultad para tomar decisiones, problemas de atención y concentración, dificultad para el análisis de las opciones, y la búsqueda constante de más información.
Así que, lee este articulo y evita leer más sobre el tema, te doy algunos ejemplos cotidianos en los que podemos caer en la infoxicación.
- Si deseas comprar algo por medio de las redes, delimita bien lo que buscas y pon un límite de las cotizaciones que harás, anota en tu libreta y así podrás tomar la mejor decisión.
- Te afectará mucho si revisas o ‘estalkeas’ perfiles de personas que te han dañado, exnovios, excompañeros de trabajo, familia, etc. No sigas tomando ese veneno.
- Elige un número determinado de fuentes informativas de noticias, intereses, deportes, salud o entretenimiento, deja de seguir a muchos.
- Cuando sientas la necesidad de consultar síntomas de enfermedad en la red, te recomiendo que no lo hagas, visita o consulta un profesional, pero si lo haces, por lo menos elige fuentes con base científica.
- No es necesario que estés en todos los grupos de WhatsApp, elige los que son realmente necesarios para tu negocio, persona y familia. Toma la decisión de salir pronto, ¡échame la culpa!
- Si no tienes un fin concreto, no es necesario que estés en todas las plataformas digitales.
- Quita la opción de las notificaciones que no son importantes, quizás tú estés bastante concentrado, pero te cayó una noticia de “¿Por qué ladran los perros?”, y ahí estás, pinchando para conocer la razón.
- No sigas páginas que te generan un vacío emocional, evita navegar en perfiles que te generan malestar. Si en lugar de motivarte, vas a estar comparándote día a día con personajes, con artistas, etc., desiste.
- Reconoce la inteligencia del algoritmo que tienes en tus aparatos electrónicos, siempre te dará más de lo que tú buscas o te gusta, pero tú debes tener el control para evitar intoxicarte.
- Si el trabajo que realizas a diario depende de la información, previene la fatiga mental con terapia ocupacional totalmente distinta al rubro informativo.
Inicia esta semana de manera responsable, no recibas más detalles de lo que puedas procesar en un momento y en un tiempo dado.
Por Irazema Ramos, Psicóloga.