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martes, abril 30, 2024

INCAE

El Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (INCAE) nace como resultado del compromiso de los presidentes de Centroamérica, el valioso apoyo del presidente John F. Kennedy y el respaldo académico de la Universidad de Harvard, especialmente su Escuela de Negocios. En 1966, INCAE estableció oficialmente su sede en Nicaragua, inaugurando su campus en Montefresco, Managua, en 1969. Cabe mencionar que esa opción la tuvo Honduras, pero quien gobernaba en esa época no le prestó la importancia que ameritaba, mientras que su compadre y homólogo en Nicaragua si valoró la oportunidad y la relevancia de la educación para la región, recibiendo con los brazos abiertos la instalación del INCAE.

Cuando nuestra amiga Ana del Carmen Retally, una brillante egresada del INCAE, nos invitó a participar en un programa para Abogados diseñado por esa institución y la Universidad de Georgetown, no dudamos ni un instante en asistir. Fue para el tercer módulo del programa que con un compañero decidimos hacer el viaje a Managua en carro, así podríamos conocer otras zonas de Nicaragua al terminar ese módulo. Llegamos antes de planificado y eso nos permitió hacer un recorrido del magnífico “Campus Francisco de Sola”. Al concluir, tuvimos la suerte de encontrar en el comedor a nuestro maestro para ese módulo que venía de la escuela de leyes de Georgetown.  La conversación con ese profesor tendría aún mayor impacto en nuestras vidas que las lecciones de los días subsiguientes, pero de eso hablaremos en otra ocasión.

Desde que arribamos la primera vez al campus sabíamos que estábamos en una institución que había alcanzado niveles de educación superior que nada tenían que envidiarles a las mejores universidades del mundo, incluyendo Harvard que fue la originalmente impulsó su creación. Hoy ese campus ha sido clausurado y silenciado por un gobierno abusivo que ignora el poder de la educación y la enorme fortaleza del espíritu incaísta. El INCAE ha sido durante décadas un faro de excelencia académica en la región, pero su capítulo nicaragüense ahora ha sido envuelto en sombras tras su cierre por parte del gobierno, lo que marca un hito doloroso en la historia de la educación superior de la región.

El INCAE nació con la visión de contribuir al desarrollo económico y social de América Latina mediante la formación de líderes capaces de enfrentar los desafíos empresariales de la región. La calidad de sus programas académicos y la red de contactos que ofrecía contribuyeron significativamente al crecimiento de la comunidad empresarial en la región. Desde sus inicios, el instituto cultivó una reputación de excelencia académica y ha atraído a estudiantes y profesionales de toda Latinoamérica, tal como ocurrió en el programa al que asistimos donde tuvimos compañeros de toda Centroamérica, Ecuador, Estados Unidos, Panamá y Perú. Hoy la educación, piedra angular del desarrollo, se convierte en víctima de la política en Nicaragua.

Aunque esta situación puede ser desalentadora, también abre la puerta a la reflexión y la acción. La comunidad académica, empresarial y la sociedad civil de la región tienen la oportunidad de unirse para resolver rápidamente ese acto de odio contra la educación. Siendo un poco egoístas, desearíamos que Honduras desde el anuncio del cierre hubiese activado toda su estructura estatal, empresarial y social para ofrecerle al INCAE un nuevo hogar en Honduras, donde pudo haber estado desde sus inicios.

El legado del INCAE no se va a desvanecer en las sombras de la política. Más bien, debería servir como un recordatorio de la importancia de salvaguardar la educación como un pilar fundamental para el progreso y desarrollo de la sociedad. El cierre de un campus puede apagar las luces de una institución, pero no debe apagar la llama del conocimiento que arde en cada mente ávida de aprender y liderar.

Por ahora nos sumamos a las palabras del Rector Enrique Bolaños para Harvard Review for Latin America: “Pero solo han cerrado edificios, no nos han cortado las alas, no nos han apagado los sueños y nuestro propósito está más vigente que nunca. El alma de nuestra institución vive en cada uno de nuestros alumnos, graduados, profesores, colaboradores, donantes y tantos amigos que nos han apoyado en las casi 6 décadas de historia de INCAE Business School en la región.”

Correo: [email protected]

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