27.6 C
Honduras
martes, mayo 14, 2024

Después de la tempestad…¿Qué viene?

Por Ilsa Díaz Zelaya

Una vez más, tenemos que convencernos que es verdad que los expertos y sabios del mundo, las conferencias de muchos países y lo que dan por sabido muchos gobiernos, es que vivimos en una zona muy vulnerable al cambio climático, y nuestro país, es de los señalados en los primaros tres lugares a nivel mundial.

Después de haber sufrido tormentas y huracanes que nos han causado tanto daño, viene ahora la restauración de todas las pérdidas, incluyendo valiosas vidas de compatriotas, entonces el Gobierno se ve comprometido a solicitar y aceptar la ayuda externa y de pueblos amigos, para que nuestros pobres poblados vuelvan de nuevo a renacer tratando de recuperar tiempo, sus viviendas, cultivos, animales, centros educativos y sus vías de comunicación. Desgraciadamente, la historia se repite, una y otra vez, a improvisar las actividades de salvar vías, de buscar dinero porque no hay presupuestos.

¿Qué hacer ahora?, debemos entender que la palabra PREVENIR PARA NO LAMENTAR DESPUÉS debe ser como una consigna de Gobierno, de las municipalidades, organismos de socorro, y población en general de preparar una COMISIÓN PERMANENTE para enfrentar los daños con que nos sorprenden los cambios climáticos, ya sea en la abundancia de agua, como en las sequías que tanto daño producen.

Ahora que se tienen frescas las cifras y  resultados repetidos de los daños, es cuando se deben organizar en forma permanente estos grupos formados por autoridades, expertos, estudiosos ambientalistas y población interesada, para realizar cuanto antes la revisión de un PLAN DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL A NIVEL MUNIICIPAL Y REGIONAL, un proyecto que se oriente no a la distribución de la tierra solamente, sino que se organice atendiendo a la conformación de las cuencas hidrográficas que tenemos y a nivel municipal un inventario hasta de las más pequeñas de las quebradas o riachuelos existentes.

Después de este ordenamiento, saldrán  las verdaderas necesidades y obras de infraestructura, el futuro de las tierras arables y de agroforestería, las zonas habitables de cada municipio, la infraestructura  y carreteras,  pero pensando en el futuro,  estas deben planificarse con el apoyo de técnicos nacionales y extranjeros, con la mayor transparencia posible. Por eso la construcción de presas y represas en la región es de urgencia, así como el apoyo de técnicos, como lo hizo el alcalde de El Progreso, al llamar a los japoneses para que atiendan su región de una vez por todas

El Gobierno y las instituciones nacionales y extranjeras, deben prepararse para que HONDURAS pueda enfrentar los desafíos futuros de naturaleza ambiental que sobrevengan a partir de ahora. Esperemos y que Dios con su sabiduría infinita nos proteja.

- Publicidad -spot_img

Más en Opinión: