24 C
Honduras
sábado, mayo 18, 2024

Seguridad

Es más que comprensible saber que la vida es una sucesión de ciclos y que estos en algún momento habrán de cerrarse. Es fácil decir o escribir desde una cómoda oficina y hacer pasto de lo que no se debe hacer. Ser ministro de Seguridad en cualquier país del mundo no es cosa fácil y, es más, es asunto de valientes. Y justo así han sido quienes han pasado por esa cartera del Poder Ejecutivo, lo mismo que el actual, que se debe enfrentar a realidades de por sí dolorosas de sus compatriotas y eso debemos reconocerlo.

A pesar de todo, tal como apuntamos, parece ser que ese ciclo se deberá cerrar en algún momento ya que según las declaraciones vertidas por el señor ministro de Seguridad, da la impresión de que el crimen y en especial la extorsión es una cuestión anecdótica y que los números le dicen que está todo bajo un cierto control y que se puede salir adelante. Ese es su aparente punto de vista, pero el de la población es otra, la realidad en la calle, en barrios, colonias, aldeas, caseríos, en los puestos del mercado, dentro y alrededor de los buses la situación es otra, asfixiante, desesperante y eso más bien podría empujar a la población a hacer justicia por su propia mano y eso es algo en lo que no se debe caer, sumado al hecho que ni siquiera se ha logrado encender las cámaras del Sistema Nacional de Emergencias 911.

Es más, ha reaparecido el fenómeno de los secuestros y de asaltos bancarios. Realmente el tema de seguridad es cuestión integral y se debe atacar desde todos los flancos posibles y los especialistas en el tema ya han manifestado que el Estado de Honduras tiene la capacidad de contrarrestarlo, solo es cuestión de voluntad política, pero ¿existirá tal cuestión?, ¿la presidente estará lista para amarrarse bien las faldas y resolver eso?, ¿tendrá esa voluntad la señora de Zelaya?, ¿le dirán la verdad sus asesores acerca de la realidad del pueblo hondureño con respecto al tema de la delincuencia? Más que esas preguntas, lo que necesitamos son las respuestas a las mismas.

Cuando un signo de enfermedad, como la fiebre, se manifiesta, se debe controlar en el momento y ya después se verá la causa para erradicarla. Incluso ya se oyen voces que piden aplicar las mismas medidas que ha hecho El Salvador con respecto a este tema, pero eso es asunto de otra entrega. La cuestión es que el señor ministro ha dicho que en Honduras no aplica, ¡pero eso ya se está aplicando en Lepaterique!, es decir que sí aplica ya que la delincuencia es la misma en cualquier lugar del planeta.

La Policía Nacional está pletórica de héroes, jóvenes que exponen sus vidas por su pueblo, hombres y mujeres valientes, pero deben también recibir el apoyo de las Fuerzas Armadas ya que constitucionalmente se puede hacer acopio de sus recursos ya que hay un enemigo interno que también lesiona la soberanía, y desde el Congreso Nacional declarar este fenómeno como delito de carácter nacional, si de verdad han llegado a legislar por su pueblo o solo a pelear prebendas y a decir tonterías. Ojalá y que nos podamos entender, solo son recomendaciones carísimas que esperamos que se apliquen. La muerte acecha y el pueblo a diario está asistiendo a sepelios que bien se pudieron evitar. Esa es la realidad.

EditorialSeguridad

Hoy en Deportes