El fiscal de Los Ángeles, George Gascón, adelantó que esta semana podrían surgir novedades en el caso de los hermanos Lyle y Erik Menéndez, quienes fueron condenados a cadena perpetua en 1996 por el asesinato de sus padres.
Tras años de apelaciones y nuevas pruebas, su condena podría ser revisada.
Entre las evidencias que han reabierto el caso se encuentra una carta escrita por Erik en 1988, meses antes de los asesinatos.
En dicha carta, describe los abusos físicos y sexuales que sufría a manos de su padre, José Menéndez.
Durante una reciente conferencia de prensa, Gascón aseguró que su oficina está evaluando la posibilidad de revisar la condena a la luz de estas nuevas pruebas.
“Tenemos la obligación moral y ética de reconsiderar este caso”, afirmó el fiscal, firme defensor de las reformas judiciales.
Una de las piezas clave de la nueva defensa es el testimonio de Roy Rosselló, exintegrante del grupo Menudo.
Quien también ha acusado a José Menéndez de abuso sexual durante su adolescencia.
Estas nuevas declaraciones han dado impulso al equipo legal de los hermanos Menéndez, encabezado por el abogado Mark Geragos.
Quien, confía en una posible reducción de la condena bajo el artículo 1172.1 del Código Penal de Estados Unidos.
Lo anterior, permite considerar el trauma y abuso previo como factores atenuantes.
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Hermanos Menéndez vuelven a estar en el foco de interés
El caso, ampliamente cubierto en los años 90, ha recobrado interés tras las producciones de Netflix que han vuelto a poner en el foco la historia de los hermanos.
Aunque la fiscalía en su momento argumentó que los asesinatos estaban motivados por la codicia, las nuevas pruebas podrían cambiar el rumbo del caso.
Este miércoles, los familiares de los hermanos Menéndez, junto a sus abogados, ofrecerán una conferencia de prensa en Los Ángeles para informar sobre las novedades.
Se espera que la oficina de Gascón tome una decisión antes del 26 de noviembre, lo que podría abrir la puerta a una posible liberación tras más de 30 años en prisión.