Yo espero que el año 2024 las cosas cambien en nuestro país, empezando por la actitud de este gobierno y sus personeros, principalmente por la de su gran líder José Manuel Zelaya Rosales, que busca crear el caos para conseguir la destrucción de la democracia, al igual que en Venezuela y Nicaragua.
Pero como no soy tan iluso, espero que en 2024 la oposición, en verdad, se organice y que entienda que, si la cosa sigue así, con la arbitrariedad y el descaro que están gobernando este país los rojinegros, nos van a llevar a la miseria: no tienen ni idea de cómo gobernar, ni siquiera tienen idea de lo que es ese tan cacareado socialismo democrático. Han nombrado funcionarios que no llenan los requisitos, hay junta directiva en el Congreso Nacional juramentada por un condenado por la administración de justicia y electa por diputados suplentes usurpadores, una Comisión Permanente ilegal eligiendo fiscales, etc.
La oposición debe entender que Libre buscará gobernar por decretos, como en la Edad Media o como hizo Hugo Chávez; que es cuestión de que se unan y se organicen a nivel nacional, que entienda que el camino a la victoria no es solo con manifestaciones, sino de organizar a todo el pueblo en todos los rincones de la nación. Si el señor Zelaya Rosales, cuando gobernaba Juan Orlando Hernández, anduvo juramentando comandos insurreccionales, y nadie se lo impidió, pues toca hacer igual que él, solo que sin payasadas, todo lo contrario, una visión de rescate a la Constitución como sucedió en octubre de 1985.
Que recuerden que muchas revoluciones pacíficas destronaron dictadores. La gloriosa huelga de brazo caídos es parte de la herencia para todos los hondureños: 1954 nos corre en la sangre a los hondureños. El pueblo unido mete miedo.
Somos gente valiente y aguerrida.
Para el 2024 quisiera soñar y pedirle al santo niño del pesebre de Belén, que me conceda un país mejor. Pedirle que:
· Luis Redondo entienda que el poder no es para que sane sus complejos internos y alivie el tremendo peso de sus oscuros secretos. Que reflexione y se vea al espejo, y en el reflejo observe que se ha convertido en el más grande traidor de la historia reciente de la política del país, ¡y!… que está haciendo todo, exactamente todo lo que él antes criticaba y por lo cual sacaba su bombo.
· Daniel Sponda entienda que la educación lo es todo, que los votantes de Libre le dieron la chamba de ministro de Educación no para que consiguiera novia, sino para que implementara una educación refundacional basada en nuevos valores, visión moderna, implementación de la tecnología, que produzca jóvenes pensantes bien capacitados y no solo mano de obra barata.
· José Manuel Matheu entienda que con respuestas sarcásticas y con su soberbia y ego desmedidos el sistema de salud no mejorará.
· Natalia Roque comprenda que llegó a la Secretaría de DD.HH. a velar por los más importantes derechos de la población, no a desahogar todo su odio, su sed de venganza, su resentimiento. Que los puestos son para cumplir con los objetivos de la institución, no para hacer el mal a cuanto se le ponga en frente.
· Los diputados de Libre lean un poco sobre historia, política, economía.
· Eliú Girón se decida de qué lado está.
· Las autoridades de Seguridad Pública vean que el país se está hundiendo en la violencia generada por el narcotráfico y las pandillas, que las extorsiones están matando a la gente. Que hagan algo urgente y contundente.
· Los funcionarios en general, sobre todo Ricardo Salgado, entiendan que no se ven lindos ni inteligentes cuando pasan todo el día destilando odio en X.
· El gordito Aldana siga con el plan bacheo, pero que lo haga de noche.
· Las autoridades de Industria y Comercio, atraigan la inversión extranjera
· El canciller deje de estar diciendo todo lo que el olanchano le manda a decir a la embajadora.
· Al fin traigan la CICIH para que investigue todos los casos de corrupción en los 12 años del gobierno cacho, y una vez finalizado, empiece con los actos de corrupción que hayan cometido los que se salieron del huacal en el actual gobierno.
· Finalmente, que la presidente, doña Iris Xiomara Castro Sarmiento, entienda que es ella la que manda, que Mel es el peor mal del país, que ejerza su poder, se deshaga de él mandándolo a alguna embajada en África, se deje asesorar por muchos de los buenos asesores que tiene y, por favor, asiente los cimientos de una nueva Honduras.
