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martes, mayo 14, 2024

CADA LOCO CON SU TEMA

Conste, a veces no se trata de uno solo, muchas veces son varios los que me pasan por la mente y para algunos de los cuales encuentro respuesta y, para otros… simplemente no.
Por ejemplo, sabemos que los hindúes tienen por costumbre incinerar los cadáveres, bien.
La costumbre de quemar los cadáveres no es nueva allí, pero aumentó con la pandemia, lo que obligó a muchos a quemar a los muertos en la calle, estacionamientos y en cuanto lugar hubiera disponible.

Bien, me pregunto yo, ¿qué sucede cuando alguien -algún hindú- muere quemado en un incendio, lo vuelven a quemar?
Suena duro, pero no he encontrado respuesta a esa curiosidad mía, ni siquiera he podido saber si eso -la doble incineración- dependería del grado de las quemaduras de la primera.
“Cincuenta por ciento o menos quemado… hay que completarlo. Más allá del cincuenta por cierto del cuerpo quemado, asunto concluido”.

No hay ningún texto que hable sobre eso y tampoco sobre lo que ocurriría con los restos no quemados de los de “cincuenta por ciento o más”.
¿Qué hacen con las partes que no fueron consumidas por las llamas, las entierran?
No pude averiguarlo y, aunque se trate de costumbres de países tan lejanos y que tienen poca o ninguna influencia en mi vida, a veces no puedo evitar el tema.
Sobre la misma idea. Supongamos que los bomberos están combatiendo un incendio en el que hay varias víctimas mortales comprobadas, apagan sus cuerpos en llamas o los dejan que se sigan consumiendo, para dedicar los esfuerzos -en primer lugar- en los que no se han quemado del todo y todavía viven y luego en las estructuras y muebles aún sin consumirse.

“Me metí” en la información sobre bomberos y sus obligaciones en India y no encontré nada al respecto, creo que tendré que preguntarlo directamente a algún hindú, cosa difícil porque hasta el momento no hay ninguno en los alrededores.
Yo, en lo personal -y con esas costumbres ancestrales- de fijo dejaría que todos se quemaran (desde luego los cadáveres, a los vivos hay que apagarlos inmediatamente) y en segundo término me concentraría en los bienes materiales que todavía no se hayan convertido en carbón.

Por otra parte, ¿tendrá alguna importancia para los hindúes -ya muertos desde luego- la forma en que son tratados sus restos?
No hay manera de darse cuenta, sólo mientras están vivos y desean ser tratados de acuerdo con las tradiciones.

¿Posibilidades de que yo algún día trabaje como bombero en India? ¡Cero!
¿Posibilidades de que yo algún día trabaje como bombero en otro lugar? Otro rotundo cero.
¿Posibilidades de que yo muera en un incendio? Está por verse.
¿Posibilidades de que usted igualmente muera en un incendio?
La misma respuesta.

¿Muy duro?
Vamos, tómelo con sentido del humor, no conviene pensar en esas cosas con mucha seriedad, ¿no cree?

Hablando -y desvariando- sobre algunas creencias hinduístas, gran parte de ellos creen firmemente en la reencarnación. Es decir, que después de muertos, el “alma” reencarna en otro cuerpo y así, una o varias veces hasta llegar al grado más alto de perfección espiritual.
Para nadie de los que me conocen es un secreto que yo no creo en nada de eso. No creo en almas, espíritus, dioses, vida después de la muerte y, desde luego, tampoco creo en reencarnaciones.

No obstante, hace un par de días leí un pensamiento de alguien -irónico desde luego-  al cual me siento tentado a unirme y que decía más o menos así: “Yo no creía en la reencarnación hasta que me puse a pensar que hay gente tan, pero tan estúpida, que no podría bastar una vida humana para llegar a ese grado de imbecilidad, por lo tanto cada vez estoy más convencido de que tiene que haber alguna clase de reencarnación”.
Yo también conozco algunas personas que son estúpidas y otras que son súper estúpidas.
Ahora, con esa nueva iluminación sobre la necesaria reencarnación para lograr un alto grado de estupidez, he buscado un nuevo término, algo que vaya más allá de súper estúpido.

No es nada fácil, así como no es fácil medir el tamaño del universo, cosa  sobre la cual  Einstein se expresó así: “Hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana y no estoy seguro en cuanto al universo”.
¿Cuál sería esa nueva categoría mayor que “súper estúpido”?
¿Súperestúpido? ¿Ultraestúpido?
No me siento satisfecho con ninguno de esos dos, tiene que haber otro, algo en que todos estemos de acuerdo.

Propongo “Megaestúpido”, ¿qué le parece?
Se aceptan sugerencias.

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