Este es un dato reciente de parte de un estudio de la empresa privada y de las Cámaras de Comercio de nuestro país. Información interesante que pone a luz el desafío que es emprender. A mi manera de verlo, esto no debe ser una profecía para los emprendedores, sino un desafío para que no sea mi empresa la que esté en esta estadística.
Muchos son los factores que llevan a tomar decisiones de cierre, ya que una empresa es como un trozo de vida, casi que un hijo para aquel que decidió enfocar su tiempo y recurso en un negocio que le dé para sostener su familia y más aún generar empleos a otros. Hace poco, pude ver dos casos de emprendimientos de hamburguesas, que reducían o cerraban su negocio, con la esperanza de retornar “Más fuertes” en un futuro.
Pienso en la ilusión con que pensaron en cómo llamarle, el menú, sus primeros clientes y que pudo pasar con el caminar de los años que pudo obligar a cerrar. He tenido muchos consejeros, cursos y he visto videos donde contemplé algunas de las causas que llevan al cierre del negocio, que comparto casi como un deber, por aquellos negocios que desean mantenerse vigentes con el tiempo.
Lo primero, el flujo de caja manda. El dinero siempre debe estar en movimiento, pero debe tener cuidado de que haya siempre reserva, para cuando el flujo de caja sea escaso. Si usted da crédito a treinta o sesenta días, con mayor razón.
Es más riesgoso que nos podamos quedar con las cuentas vacías para operar, si estamos esperando que algunos clientes paguen y no lo hacen. La planilla se paga quincenal, tanto como la luz y los servicios de cada mes.
El cobro es tan importante como la venta. Asesórese con un financiero en la medida de pueda y que le indique cuánto debe estar manteniendo de flujo de caja para operar. Lo segundo, descuidamos las ventas.
En la transición de ser emprendedor a empresario muchas veces nos toca hacer todo. Revisar el mantenimiento del local, que las materias primas estén a mano siempre, son tantas cosas que toca estar al pendiente que descuidamos las ventas. Y precisamente este es el pulmón de toda empresa. Es esto lo que nos genera el flujo de caja.
Si usted está vendiendo, lo demás lo podrá ir resolviendo paso a paso. Si sus ventas se caen su empresa sin duda se secará. Y como último punto, para no alargarlo mucho, creo que es que nos distraemos en otras cosas quitando la atención al negocio.
Negocio es enfoque. Me refiero, cuando uno empieza, tiene toda la atención puesta en el crecimiento de su empresa, le dedica día y noche a ello para que pueda desarrollarse. Pero poco a poco nos desviamos en otros intereses.
Y eso hace que todo aquel enfoque que poníamos en llevar nuestro negocio al éxito, ahora esté en un segundo plano y sea poco el tiempo que le estemos dedicando a ello. Suele pasar después de un par de años, donde creemos que todo marcha sobre ruedas y comenzamos a soltar. Comenzamos a dejar de supervisar, nuestro control de calidad baja, nuestros clientes se ausentan.
Y cuando menos acordamos, las cuentas no nos cuadran. Es muy recomendable un compromiso a toda prueba con su negocio. Que resista el paso del tiempo, que lo reinvente cada vez que necesite. Y recuerde: escape de esta estadística, cuide su flujo de caja, mantenga sus ventas a tope y enfóquese siempre en su negocio.