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Honduras
viernes, marzo 14, 2025

Fraude, voto y esperanza

La democracia plagada de corrupción es cara, ineficiente, no trae desarrollo, ni bienestar a la población, segrega entre los ricos, los menos ricos y los marginados por el sistema. E

l proceso electoral de las elecciones primarias internas realizada el pasado domingo fue una burla al derecho que tiene la población de ejercer el sufragio. Este ensayo desordenado, para muchos luce como un fraude, un boicot que le ha costado alrededor de 200 mil millones de lempiras a los hondureños.

Para entender un poco mejor que significa en términos de desarrollo humano invertir apropiadamente esta cantidad de dinero, le hice una consulta a la inteligencia artificial, en este caso fue al ChatGPT, su respuesta fue más humana y empática que la de los grupos de poder que dirigen esta república, para muchos todavía bananera.

Les comparto este análisis con autoría de esta IA: 200 mil millones de lempiras es una cantidad exorbitante (equivale a siete mil ochocientos quince millones de dólares estadounidenses), especialmente para un país con tantas necesidades como Honduras.

Para ponerlo en perspectiva, veamos algunas alternativas de inversión que podrían transformar la vida de millones de hondureños: Educación de calidad para todos: Construcción y equipamiento de miles de escuelas modernas, formación y mejores salarios para docentes.

Programas de becas y acceso a educación superior gratuita. Salud pública eficiente: Construcción y equipamiento de hospitales de calidad en todo el país. Abastecimiento de medicamentos esenciales. Programas de prevención de enfermedades y mejora de la atención primaria.

Seguridad y justicia: Inversión en la modernización del sistema judicial. Capacitación y equipamiento de fuerzas de seguridad. Programas de reinserción para reducir la delincuencia juvenil.

Infraestructura y transporte: Reparación y construcción de carreteras estratégicas. Desarrollo de transporte público seguro y eficiente. Electrificación y acceso a agua potable en comunidades rurales.

Desarrollo económico y empleo: Créditos accesibles para emprendedores y pequeñas empresas. Impulso a la agroindustria y al turismo sostenible. Creación de zonas de desarrollo económico para atraer inversión.

Tecnología y digitalización: Expansión del acceso a internet en todo el país. Digitalización de trámites gubernamentales para reducir la corrupción. Programas de capacitación en tecnología y emprendimiento digital.

La pregunta clave es: ¿por qué se necesita tanto dinero para organizar unas elecciones en un país donde la pobreza es generalizada y los servicios básicos están colapsados? ¿Cómo se justifica un gasto tan desproporcionado? Con esas preguntas cerró la propuesta y análisis de la IA, que califica de exorbitante lo que se ha gastado en una elección interna, en un país con todo tipo de carencias.

Para la democracia las elecciones libres son vitales para buscar la alternabilidad en el poder. En Honduras se realizaron estas elecciones internas que han sido cuestionadas por el desorden logístico que representó que muchos ciudadanos estuvieran esperando a que abrieran su centro de votación todo el día y miles que no pudieron ejercer su derecho.

Sumado a una oferta electoral que no representa en su mayoría valores como la transparencia y ética, menos la honestidad y mucho menos presentan un plan para salir de la miseria, que atrapa a más de la mitad de la población hondureña. Hay cerca de cinco millones de personas inscritas para ejercer el sufragio.

Se gastaron millones de dólares en estas elecciones, los únicos beneficiados directos son los aspirantes a cargos populares. Beneficia someramente a la nación para continuar proyectando una imagen de democracia. Es como estar atrapados en una relación tóxica donde la abusada no sabe cómo detener a la persona hostigadora, pero sigue aguantando porque no sabe cómo finalizar la relación.

Es frustrante para la población pensante, la que no usa la política como medio de vida, ver como los menos calificados se aferran al poder, usando el modelo de países autoritarios, estamos a un paso de ser como Cuba, Venezuela o Nicaragua, ese modelo parece que es el que están siguiendo.

Da tristeza y frustración, pero mientras tengamos libertad de expresión usaré esta columna de opinión para construir esperanza, para abrir los ojos y el entendimiento de mis jóvenes lectores (los jóvenes de corazón de también), que están siempre con la ilusión de que se construya una patria próspera, ética y libre grupos corruptos que solo buscan sus intereses.

“¡Bendiga Dios la prodiga tierra en que nací! Libre y civilizada, agrande su poder en los tiempos y brille su nombre en las amplias conquistas de la justicia y del derecho.”

(Froylán Turcios, 1847-1943, poeta, narrador, editor y periodista hondureño, considerado el intelectual hondureño más importante del siglo XX).

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