Los apagones son impensables en los países desarrollados, cuando esto ocurre el caos se apodera de la comunidad, como lo vimos recientemente en España y Portugal, la gente no sabía cómo reaccionar ante un apagón general, porque todo se mueve con energía, sin importar la fuente de la que provenga. El servicio del metro se canceló, el servicio de comunicaciones está limitado, la seguridad ciudadana y alimentaria está en juego. Sumado a esto la posibilidad de un ciber ataque, o el inicio de una guerra.
“Durante el lunes 28 de abril de 2025, ocurrió un apagón masivo que afectó a España y varias regiones de Europa, generando caos en la península ibérica, en especial en España y Portugal. Miles de personas se vieron atrapadas sin electricidad, lo que paralizó aeropuertos, supermercados, redes de transporte, y sistemas de pago, creando una situación sin precedentes.” (Infobae, 2025).
Esta situación que ha vivido parte de Europa es frecuente en los países en desarrollo. Es importante reflexionar sobre temas energéticos, como elemento clave para el acelerar el desarrollo sostenible. Desde la Revolución Industrial, se pusieron en práctica formas de producción que no son compatibles con el ambiente. El uso del carbón como fuente de energía para impulsar el transporte y la producción industrial. Ante estos desafíos se han encontrado soluciones como el uso de paneles solares, que son fuentes inagotables y renovables. La factura eléctrica se reduce de manera notoria.
Aunque sabemos que la energía producida con carbón contamina, hay varias razones por las que todavía se utiliza y los países más ricos son los principales consumidores de esta. China, aunque le ha apostado a las renovables la utiliza para la generación eléctrica e industria pesada, siendo uno de los principales consumidores a nivel mundial, junto con la India, que tiene una gran dependencia por el bajo costo y disponibilidad local, aunque poco a poco están invirtiendo en energía renovable. Los Estados Unidos a pesar de que han invertido en energía renovable, todavía no han podido salir completamente del carbón. Al igual que Alemania, la guerra de Ucrania con Rusia, impulsó a este país a reactivar las plantas de carbón.
Algunas ventajas que ofrece la fuente de carbón es que a diferencia de la solar o de la eólica, es que no depende del clima, se puede producir electricidad las 24 horas. Hay muchas industrias que dependen del carbón y hay muchos empleos en juego.
Un aspecto positivo de resaltar de Honduras, a pesar de los frecuentes apagones, es que la matriz energética cada vez apuesta por las energías renovables, los altos precios que se pagan a impulsado al sector privado a invertir en paneles solares, contribuyendo paralelamente a minimizar el impacto ambiental, la meta como país es alcanzar el 80% de energía renovable en la generación total de electricidad antes del 2040. Actualmente, se depende en un 60% de fuentes fósiles, la biomasa (la leña) sigue alimentando los fogones y eco-fogones en las zonas rurales.
Es curioso, en Honduras nos hemos acostumbrado a vivir en medio de apagones, muchas empresas, universidades cuentan con plantas eléctricas, al igual que algunos hoteles, porque ya es parte del drama de los hondureños.
A nivel global, el suministro de energía en un país va más allá de un servicio común, está relacionado con la geopolítica, el impacto ambiental, social y económico. Los países desarrollados que viven sus primeros apagones generales deben replantearse no solo su modelo energético, si no su dependencia y vulnerabilidad.
