35.8 C
Honduras
domingo, mayo 5, 2024

UNA MONEDA AL AIRE ¿TRISTEZA O DEPRESIÓN?

Es bastante común que, en ciertas etapas de nuestra vida, se presenten situaciones complejas que nos lleven a experimentar emociones incómodas. Por lo que es indispensable tener claro, sin necesidad de tirar una moneda al aire y esperar cara o cruz, para saber cuándo estamos presentando una tristeza habitual, común o esperada y cuándo dicha experiencia se está saliendo de nuestras manos; provocando una incomodidad mayor, encaminándonos a padecer un episodio depresivo.

  • UN PANORAMA CLARO

Todos los seres humanos, experimentamos mínimo seis emociones básicas, como ser alegría, miedo, ira, sorpresa, asco, independientemente de nuestro entorno, experiencias de vida, cultura, edad, etc. Y dentro de estas emociones está considerada también la tristeza, la cual es una respuesta natural de nuestro cerebro ante una situación que valoramos como negativa, el problema es que, si la tristeza perdura en el tiempo, el nivel de incomodidad se agudiza hasta el punto de provocar una discapacidad. Según datos del Estudio Global de Enfermedades llevado a cabo por la OMS en 2004, se encontró que la principal causa de discapacidad son las enfermedades neuropsiquiátricas, con una incidencia de 45 % en la población, principalmente la depresión, el abuso de alcohol, esquizofrenia y el trastorno bipolar.

Los profesionales de la salud mental tomamos como referencia innumerables investigaciones científicas, compilaciones y manuales que nos dan un panorama claro, basado en criterios formales para analizar signos y síntomas, para poder descartar o confirmar la presencia de un trastorno depresivo.

En este artículo explicamos por lo menos tres puntos básicos para saber cuándo estamos ante una emoción básica como la tristeza, o bien ante un trastorno depresivo.

1.- AUMENTO O DISMINUCIÓN: Debes prestar mucha atención a tu apetito, a la cantidad de tiempo que duermes, a la agitación o disminución de tu actividad psicomotora, disminución en tu nivel de atención, aumento de pensamientos de minusvalía, ideas o intentos suicidas, sentimientos de culpa y una pérdida significativa de tu energía diaria, la presencia de estos signos son significativos ante un episodio depresivo.

2.- FALTA DE VOLUNTAD: Es importante mencionar que, si ya no tomas la iniciativa para llevar a cabo actividades que normalmente hacías, como, por ejemplo, caminar, borrar tus redes sociales, hablar con tus amigos, arreglar tu apariencia física, compartir con alguien algo que antes era de tu interés, simplemente porque disminuyó o desapareció el sentimiento de placer que antes tenías; puedes estar experimentando una depresión.

3.- CONSIDERA REVISAR EL TIEMPO: El trastorno depresivo es una sensación de vacío, de desazón, sentimientos de desesperanza, de malestar general ante la existencia misma, el cual permanece generalmente a diario en tu vida, la mayor parte del día, por lo menos durante seis meses, pero lo ideal es buscar ayuda antes de ese tiempo, ya que es un trastorno serio que debe ser tratado por un profesional, porque afecta muy significativamente a la calidad de vida del que lo padece. Sirve de mucho tener a tiempo un diagnóstico y una terapia enfocada en reestructurar los pensamientos para recuperar tu bienestar psicológico.

Los tres puntos tratados aquí, solamente es una puerta inicial para que ya no lances esa moneda al aire y que la suerte o probabilidad decida en indicarte lo que tienes, así que, si logras identificar que tú o alguien más está padeciendo estos síntomas, busca ayuda.

PORQUE HAY SONRISAS QUE ESTÁN CARGADAS DE MUCHO DOLOR.

Si tienes algo que agregar o contar escríbenos a [email protected].

- Publicidad -spot_img

Más en Opinión: