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martes, diciembre 3, 2024

Tomar agua puede ser malo

No me refiero al agua que sale de la llave (cuando viene) esa definitivamente es terrible. A mediados del siglo pasado algunos informes médicos recomendaban tomar 8 vasos de agua, aproximadamente 2.5 litros diarios. El informe que convirtió en “realidad” esa aseveración se quedó corta de alguna manera ya que se omitió la parte que decía “o su equivalente en otras fuentes” tales como verduras, jugos y hasta carnes. Todo contiene agua en mayor o menor grado y esa agua debe contar entre las necesidades de líquidos que tiene el cuerpo humano. Los ocho vasos de agua se volvieron tan populares que condujeron al desarrollo de una enorme industria, la venta de agua embotellada. Pero lo que mucha gente ignora es que el agua puede llegar a ser dañina, no sólo cuando alguien se ahoga en una piscina, río o mar o cuando lo atropella un camión cargado de botellones de agua. Tomar agua en exceso puede conducir a enfermedades y hasta la muerte, como sucedió con el legendario dragón de las artes marciales Bruce Lee. Existe una condición clínica en algunas personas llamada hiponatremia que es “la incapacidad de los riñones para excretar el exceso de agua” y eso, en caso extremos puede conducir a la muerte. La revista Clínical Kidney Journal sostiene que a eso se debió su muerte temprana. Es frecuente ver gente cargando una botellita de agua y bebiendo constantemente lo que conduce, también, a frecuentes viajes al baño. Toman agua, orinan, toman agua, orinan, etc. casi como un vicio. En lo personal tengo más de cincuenta años de no tomar ni un vaso de agua y, hasta la fecha, mi salud es perfecta, jamás he padecido de nada o he estado un día en cama por ninguna razón (excepto cuando me quedo vagando o, como en este momento, escribiendo a altas horas de la noche). ¿Qué hay del agua embotellada comercial? La publicación científica “Fronteras de la Química” asegura que el agua embotellada no es tan pura como la pintan y que las partículas de micro plástico son más frecuentes en el agua embotellada que en la del grifo. ¿De dónde obtengo los líquidos que mi cuerpo necesita? Como dije anteriormente, la mayoría de los alimentos tiene un alto porcentaje de agua la que es absorbida por la máquina procesadora que es el sistema digestivo humano y, repito, mi aseveración de que nunca, jamás, tomo agua es totalmente cierta, quienes me conocen de cerca lo saben. El maravilloso mecanismo del cuerpo humano tiene una señal para indicarnos cuándo necesita reponer los líquidos gastados por la orina, el sudor y la hidratación de sus tejidos, se llama sed. Uno debe ingerir líquidos cuando tiene sed, no por vicio o hasta una especie de norma social. Precisamente ese término se aplica a “tomar agua o bebidas de cualquier clase para acompañar los tiempos de comida”. En los restaurantes acostumbran servir agua (ahora la venden) y cuando el mesero toma la orden de los alimentos, no falta la pregunta “qué van a tomar”. De nuevo tengo que citar mi ejemplo personal: muy pocas veces tomo alguna clase de líquido con mis alimentos. ¿Qué tiene que ver comer con beber? ¿Será que hay algo comercial detrás de eso? A veces la bebida (cerveza, gaseosas, jugos, vinos etc.) que presionan en los restaurantes para acompañar la comida tienen un valor similar -y hasta más alto- que el propio platillo. Claro que hay un negocio ahí, no lo dude. En el gimnasio al que asisto la mayoría de las personas cargan contenedores con agua (que cada día son más grandes y más pintosos) de los cuales beben constantemente, de nuevo soy casi la excepción, jamás he necesitado beber nada mientras estoy en mi rutina. ¿Cuándo repongo los líquidos? Después -aunque no inmediatamente- de terminar mis ejercicios. Luego del negocio del agua está el creciente comercio de las “bebidas hidratantes”, cuyo nombre termina generalmente en “ade”, como Gatorade, etc. Cargadas de azúcar y otros químicos son más bien perjudiciales en casos extremos. ¿Cuál es la mejor bebida hidratante, inclusive más que el agua? La leche, comprobado científicamente, sin ninguna duda. La razón es sencilla; cuál es el primer líquido que tomamos al nacer? Nuestro organismo está condicionado a recibir leche y sólo en casos particulares de intolerancia a la lactosa, la leche es el mejor hidratante que existe, lo demás -desde luego- es totalmente comercial. Cierto que a cierta edad el organismo pierde la capacidad para absorber todos los nutrientes de la leche, pero no así el líquido, que es el que se necesita para hidratarse y de eso estamos hablando. Le recomiendo que lea un poco más sobre el tema, posiblemente cambiará sus hábitos de hidratación y economizará dinero, el agua embotellada ahora es casi más cara que la gasolina.

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