TEGUCIGALPA. Un informe global realizado por el instituto Childlight de la Universidad de Edimburgo, reflejó que Honduras reportó 123 casos diarios de abuso sexual en línea, o una media de 868 por semana durante el 2023.
Añadieron el año pasado el país contabilizó un total de 45,162 denuncias de imágenes de abuso sexual infantil en internet, según este informe, Childlight, recolecta datos sobre seguridad infantil, y ayer dio a conocer el índice “A la luz”, donde examina la prevalencia de la explotación y abusos sexuales de niñas, niños y adolescentes en línea (EASNNAEL) a nivel mundial.
En sus estudios, Childlight da a conocer que más de 300 millones de niños al año son víctimas de abuso y explotación sexual en línea, ya que reportan un caso cada segundo.
Los documentos señalan que distintas agencias internacionales fueron alertadas de 2.6 millones de casos de archivos con imágenes sexuales de menores de edad en 21 países de habla hispana.
En ese sentido, destacan que la falta de estadísticas completas en muchos lugares, examinó 125 estudios con muestras de 57 países 2 y más de 36 millones de denuncias enviadas a las cinco principales organizaciones policiales y de vigilancia, entre ellas la Interpol y el Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados de Estados Unidos (NCMEC, en inglés).
LATINOAMÉRICA
De acuerdo a lo dado a conocer por Childlight en su informe que analizó datos recientes del NCMEC relativos a 21 países de habla hispana, detalla que en México se notificaron 17,468 a un ritmo de casi 2,000 al día y 602,660 en Colombia, con 1,650 diarios.
Asimismo, recibieron denuncias de otros países como Costa Rica (18,042); El Salvador (27,560); Guatemala (75,230); Honduras (45,162); Nicaragua (48,018); Panamá (31,973).
De igual manera de Cuba (19,242); República Dominicana (102,724); Puerto Rico (5,358); Argentina (134,880); Bolivia (33,300); Chile (64,495); Ecuador (136,302); Paraguay (18,486); Perú (159,605); Uruguay (9,808); Venezuela (249,567) y Guinea Ecuatorial (567).
Para el director ejecutivo de Childlight y exdirector de la Interpol, Paul Stanfield, “esto es una pandemia de salud global, que ha permanecido oculta durante demasiado tiempo”.
Ocurre en todos los países y está creciendo exponencialmente”, subrayó en un comunicado.