COMAYAGUA. Un joven de 18 años fue requerido por las autoridades policiales cuando asistía al entierro de las víctimas de la masacre de Comayagua debido a que sería uno de los implicados en el hecho.
Miguel Martínez Madrid, portavoz de la Policía Nacional, indicó que el detenido iba junto al cortejo fúnebre, y portaba un arma sin documentación, por lo que no descartan que iba con la intención de cometer un ataque.
EL funcionario aseguró que la captura se dio gracias a que una persona informó a los agentes que custodiaban el sepelio que un hombre que no es de la comunidad se portaba sospechoso, rápidamente procedieron a revisarlo y fue cuando encontraron el arma.
Las autoridades no dieron más información sobre esta captura. Horas antes, Martínez Madrid aseguró que era cuestión de horas para que los implicados en la masacre de Comayagua se arrestaran. Al tiempo que informó que se está ofreciendo una recompensa de 300,000 lempiras a quien dé información sobre los sospechosos.
Agregó que esta recompensa se dará únicamente a la persona que dé información fidedigna de los hechores. Por lo que los que sepan del paradero de los implicados pueden comunicarse el 143, 9596-0523 o al 911.
Martínez Madrid expresó que el ciudadano que proporcione información estará bajo un estricto sistema de confidencialidad. Y que no se dará a conocer su identidad, ya que se identificará con un código alfanumérico.
Explicó que al informante se le asignará un número telefónico al que tendrá que enviar fotografías. Así como, videos o capturas de conversaciones como evidencia. Luego los agentes verificaran si es verídico y al confirmarla se le dará la recompensa de L300,000.
Martínez Madrid mencionó que ya tienen identificados a los hechores. Por lo que es cuestión de horas para que den con el paradero de los sospechosos.
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CRIMEN
El lunes por la noche, hombres fuertemente armados que estaban escondidos en el monte emboscaron a las víctimas. Que se trasladaban en un carro en el lugar antes mencionado; versiones indican que regresaban de visitar a un familiar.
Las víctimas se identificaron como: Linder Aguilar del Cid (de 20 años), Henry Ismael Aguilar (de 22), Carlos Humberto Aguilar del Cid (de 25). Edwin Anael Hernández Cálix (de 28), Miguel Aguilar del Cid (de 29), José Aguilar Morales (de 39). E Ismael Aguilar Morales (de 49), miembros de una misma familia y que según las indagaciones el atentado iba contra ellos debido a que la hipótesis que se maneja es una vendetta.
En ese incidente también perdieron la vida la profesora Rosa Delia Canales Alemán (de 35) y el pastor evangélico Hernán Domínguez (de 40), ambos iban en el automotor, puesto que eran conocidos de los demás y les dieron jalón hasta su lugar de residencia. En la escena del crimen quedaron ocho cuerpos; Dionisio Aguilar Morales murió cuando era trasladado a un centro asistencial de la zona.
El ministro de Seguridad, Ramón Sabillón, apuntó a que la principal hipótesis del hecho es que los ahora occisos son integrantes de una familia que habría asesinado a un pariente de los hechores.