San Pedro Sula. El Motagua, dirigido por el argentino-hondureño Diego Vázquez, se clasificó este sábado a la final del torneo Apertura de Honduras al empatar 2-2 (4-3) con el Marathón en el partido de vuelta de las semifinales.
Los locales del Marathón, jugando en su propio Estadio Yankel Rosenthal, en el primer tiempo tuvieron mayor dominio del balón.
También, crearon varias jugadas de peligro ante la portería rival, defendida por el argentino-hondureño Jonathan Rougier.
Marathón llegaba al campo rival por los extremos y el centro con Isaac Castillo, Samuel Elvir y Clayvin Zúniga.
Motagua, que tuvo menos llegadas, atacaba más por la derecha con un juego liderado por el centrocampista Carlos Argueta.
Falta de contundencia
La contundencia que le faltó a Marathón en el primer episodio, le sobró a Motagua, que en el descanso ventajeaba 0-2, con goles de Yeison Mejía y Juan Delgado.
El primer gol, al minuto 32, llegó en piernas de Mejía al rematar una pelota rechazada por el portero del Marathón, el panameño César Samudio.
Ante un potente disparo del argentino Agustín Auzmendi, que era el único hombre en punta del Motagua.
La segunda anotación, finalizando el primer tiempo, llegó de un lanzamiento libre ejecutado por Delgado.
El remate desviado por un defensa de la barrera del Marathón, desubico a Samudio.
Segundo tiempo
En el segundo tiempo Marathón hizo varios cambios, mientras que Motagua jugaba más a controlar al rival y atacar al contragolpe.
Desde el minuto 63 Motagua se quedó con diez hombres por expulsión del centrocampista Edwin Maldonado, por juego brusco.
Marathón descontó al minuto 79 en piernas de su capitán, Clayvin Zúniga, mediante lanzamiento de penalti.
Con el descuento Marathón revivió sus esperanzas de llegar a la final y el partido se volvió dramático.
El dramatismo fue mayor al minuto 86, cuando Clayvin Zúniga, tras ejecutar un segundo penalti, rechazado por Rougier, empató el partido 2-2.
Ocasión desaprovechada
Los locales del Marathón desaprovecharon otra ocasión cuando ya se jugaban los siete minutos de reposición, al estrellar Cristian Sacaza una pelota en el travesaño de la portería del Motagua.
Marathón necesitaba un gol más para no quedar eliminado, pero el tiempo no le alcanzó.
Motagua venció a Marathón por 2-1 en el jugo de ida de las semifinales, el pasado miércoles en el Estadio Nacional José de la Paz Herrera, de Tegucigalpa.
Luego de eliminar a Marathón, las «águilas» del Motagua quedan a la espera de conocer, este domingo, al rival que tendrán en la final.
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Que saldrá de la llave entre Olimpia, último campeón, que dirige el argentino Pedro Troglio, y Génesis.
En el juego de ida, Olimpia, de visita, se impuso por 0-1 al Génesis, que necesita ganar por dos goles de diferencia para poner pie en la final.
A Olimpia, que tiene en su escaparate 36 copas, le es suficiente un empate para jugar una nueva final contra Motagua, su más enconado rival y vecino, que suma 18.