La presidenta Xiomara Castro fue recibida en audiencia privada por el Papa Francisco en el Vaticano, en un gesto que refuerza los lazos bilaterales y resalta la relevancia de la Iglesia en la vida hondureña.
Una relación que también marcó un capítulo clave durante el mandato del expresidente Juan Orlando Hernández.
El pasado 20 de octubre de 2022, En una visita cargada de simbolismo y diplomacia, la presidenta de la República de Honduras, Iris Xiomara Castro Sarmiento, fue recibida por el Papa Francisco en una audiencia privada en el Palacio Apostólico Vaticano.
El encuentro, que inició alrededor de las 8:50 a.m., reafirmó las buenas relaciones entre ambos Estados y subrayó el papel fundamental de la Iglesia en el desarrollo social de Honduras.
La reunión fue seguida por el tradicional intercambio de presentes: el Papa ofreció a la mandataria un ramo de olivo de bronce, símbolo de paz, junto con documentos pontificios como el Mensaje para la Paz, el documento sobre la Fraternidad Humana y una copia del libro sobre la histórica Statio Orbis del 27 de marzo de 2020.
Por su parte, Castro obsequió una estatua de Nuestra Señora de Suyapa, patrona de Honduras, una biografía suya y un rosario elaborado con madera local.
Posteriormente, la presidenta hondureña se reunió con el Cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, acompañado por monseñor Paul Richard Gallagher.
En este encuentro se reiteró la intención de fortalecer las relaciones bilaterales mediante un futuro Acuerdo Marco, y se valoró la labor de la Iglesia en áreas como la educación, la salud, la caridad, el apoyo a los migrantes y la lucha contra la pobreza.
Un precedente en la relación Vaticano-Honduras
Este histórico encuentro con el Papa Francisco no es el primero entre un mandatario hondureño y el líder de la Iglesia Católica.
En abril de 2014, el entonces presidente Juan Orlando Hernández también fue recibido en el Vaticano, en el marco de la canonización de los papas Juan Pablo II y Juan XXIII.
Hernández, acompañado de su familia y una delegación de 17 personas, sostuvo un encuentro privado con el Papa, al que le pidió orar por Honduras y le regaló una escultura de la Virgen de Suyapa.
El pontífice correspondió con rosarios y una oración junto a la madre del presidente. Durante la canonización, celebrada en la Plaza San Pedro, Honduras rindió homenaje a Juan Pablo II con la develación de un monumento en Tegucigalpa, “El mensajero de la paz”, recordando su visita pastoral de 1983.
Fe y diplomacia: una alianza con historia
Tanto en el mandato de Hernández como ahora con Xiomara Castro, los encuentros con el Papa Francisco demuestran el continuo interés del Estado hondureño por fortalecer su vínculo con la Santa Sede.
La figura de la Virgen de Suyapa, presente en ambos intercambios, simboliza esa unión espiritual entre el pueblo hondureño y la Iglesia.