Adrián Rodolfo Padilla Álvarez, de 38 años, ha sido designado como el sustituto de su padre, Rodolfo Padilla Sunseri, en la candidatura a la alcaldía de San Pedro Sula.
Este cambio se dio como parte de los acuerdos alcanzados entre los movimientos POR, M-28 y Nueva Corriente.
Padilla Sunseri, quien ya ocupó la alcaldía entre 2006 y 2009 durante el gobierno de Manuel Zelaya Rosales, defendió su derecho constitucional a postularse nuevamente.
“El derecho constitucional que tiene cualquier hondureño es de ser elegido y ser electo”, afirmó tras formalizar su inscripción ante el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Sin embargo, su trayectoria política ha estado marcada por controversias. Tras finalizar su mandato como alcalde, fue objeto de diversas investigaciones por presuntos actos de corrupción.
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La Fiscalía lo requirió en múltiples ocasiones, pero las resoluciones del pleno de magistrados de la Corte Suprema de Justicia y un Decreto de Amnistía le permitieron beneficiarse de medidas judiciales que pusieron fin a los procesos en su contra.
En 2017, Padilla Sunseri abandonó el país mientras enfrentaba una medida de prisión preventiva por un caso de fraude en la administración municipal.
Su regreso a Honduras el pasado 18 de enero generó gran expectación en el ámbito político local, reavivando el debate sobre su figura y su influencia en la política sampedrana.
Con su inscripción como precandidato, Padilla Sunseri reabre un nuevo capítulo en la política de San Pedro Sula, buscando recuperar la alcaldía bajo la bandera del partido Libre.
Mientras tanto, su hijo, Adrián Rodolfo Padilla Álvarez, asumirá el reto de continuar con la candidatura en un escenario electoral que promete estar marcado por intensas disputas y expectativas ciudadanas.