Nueva York.- Manifestantes llenaron el vestíbulo de la Torre Trump en la ciudad de Nueva York, luego del arresto de Mahmoud Khalil, un activista de la Universidad de Columbia, por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE).
Los activistas, pertenecientes a la organización Voz Judía por la Paz, portaban camisetas rojas con la leyenda «Los judíos dicen que dejen de armar a Israel» y pancartas con mensajes como «Oponerse al fascismo es una tradición judía» y «Luchen contra los nazis, no contra los estudiantes». También coreaban «Traigan a Mahmoud a casa ahora».
La policía, que se encontraba desplegada dentro y fuera del edificio de la Quinta Avenida, procedió a arrestar a los manifestantes luego de advertirles que desalojaran el lugar.
La Torre Trump, sede de la Organización Trump y residencia del expresidente cuando se encuentra en Nueva York, fue el escenario de la protesta.
Khalil, de 29 años, un palestino nacido en Siria, lideró las protestas pro palestinas en la Universidad de Columbia el año pasado y actuó como negociador entre estudiantes y funcionarios universitarios.
Fue detenido en su apartamento, propiedad de la universidad, el sábado por la noche por agentes de ICE. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) confirmó el arresto el domingo, alegando que Khalil había «liderado actividades alineadas con Hamás» y que la acción se tomó «en coordinación con el Departamento de Estado».
El expresidente Trump acusó a Khalil de ser «pro-Hamás», mientras que el senador Marco Rubio declaró que Estados Unidos revocaría las visas y tarjetas verdes de los «partidarios de Hamás en Estados Unidos».
Los partidarios de Khalil denuncian que su arresto es un ataque a la libertad de expresión y han organizado protestas en la ciudad y en todo el país.
El miércoles, cientos de personas se congregaron frente a un tribunal de Manhattan durante una breve audiencia sobre el caso.
Khalil se encuentra detenido en un centro de detención de inmigrantes en Luisiana, tras una breve estancia en una cárcel de Nueva Jersey. No ha sido acusado de ningún delito y está casado con una ciudadana estadounidense embarazada de ocho meses.
Su arresto ha generado un intenso debate sobre si la administración Trump violó sus derechos de la Primera Enmienda al detenerlo e intentar deportarlo.
Durante la audiencia del miércoles, los abogados de Khalil denunciaron que no han podido tener una sola llamada telefónica protegida entre abogado y cliente con él.
Rubio respondió a las críticas, argumentando que «no se trata de libertad de expresión». Afirmó que Estados Unidos puede negar o revocar visas y tarjetas verdes a personas que considere que fomentan actividades antijudías, antisemitas o que sean «partidarios de Hamás».
«Nadie tiene derecho a una visa de estudiante. Nadie tiene derecho a una tarjeta verde», añadió Rubio, enfatizando que Estados Unidos puede negar una visa «prácticamente por cualquier motivo».
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