Tegucigalpa. A pesar de la extensión del estado de excepción, los transportistas han seguido pagando extorsión, incluso con sus vidas y la impunidad continúa a la orden del día, dijo este martes el dirigente del transporte Wilmer Cálix.
Cálix, manifestó que es lamentable que, en el estado de excepción, sigan pagando grandes cantidades de dinero por extorsión.
Y lo que es aun mas preocupante, que sigan muriendo transportistas.
El dirigente señaló que hay poco compromiso por parte de las instituciones que conformar el estado de excepción.
“Vemos una Policía Nacional hoy comprometida, vemos algunas instituciones muy tibias, muy frías en los casos de regulación de empresas que venden chip”.
Una fiscalía lenta
Según los transportistas, durante el presente año la impunidad sigue imperando, y para muestra es que de 1,700 capturas que realizó la Policía solo hay 56 judicializaciones.
“La Fiscalía va lenta, vemos en los jueces que hay una negligencia para aplicar la ley”, zanjó Cálix.
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De igual forma, resintió que faltan reformas en la Ley de Transporte que no se realizaron debido a la parálisis legislativa en el Congreso Nacional.
El dirigente recordó que este sector tiene 28 años de estar pagando extorsión, y en esos años ya son más de 3 mil las muertes de personas ligadas al sector.
Mismos casos, que la mayoría han quedado en la impunidad.
Apuntó que según algunos cálculos que manejan en el sector, la cifra que han pagado en extorsión es de 18,600 millones de lempiras.
Una cifra tan importante que bien se hubiesen construido dos hospitales, comparó.