Mario Cálix, un joven universitario de 22 años, fue asesinado a balazos el pasado sábado 31 de mayo, en la residencial Jardines del Country, en el Distrito Central, departamento de Francisco Morazán.
Según informaron medios de cobertura nacional, Mario se encontraba junto a un amigo cuando ambos fueron atacados mientras se desplazaban en un vehículo tipo pick-up.
Minutos antes, los jóvenes habían salido rumbo a un negocio, sin saber que eran seguidos por dos individuos a bordo de una motocicleta.
Testigos indicaron que, sin mediar palabra, uno de los sicarios abrió fuego contra el vehículo, acabando con la vida del joven en el acto.
El cuerpo de Mario quedó tendido en el interior del automóvil, mientras que su acompañante, cuya identidad aún no ha sido revelada, fue trasladado herido a un centro médico de la capital.
Una víctima con vínculos políticos
Mario Cálix era originario de Catacamas, Olancho, y pertenecía a una familia con vínculos políticos relevantes.
Era hijo de Óscar Cálix, exconcejal y líder del Partido Nacional, y sobrino de Teresa Concepción Cálix Raudales, actual diputada por Olancho.
Versiones preliminares también señalan que el joven sería sobrino del diputado Jorge Cálix y del exvicealcalde Mario José Cálix, conocido como “Cubeta”, actualmente extraditado a Estados Unidos por vínculos con el narcotráfico. Sin embargo, esta relación familiar aún no ha sido oficialmente confirmada.
Dolor y consternación
La trágica muerte de Mario ha generado una ola de consternación en redes sociales. Familiares, amigos y conocidos lo describen como un joven alegre, lleno de vida y con un futuro prometedor.
“Era un chico excelente”, escribieron allegados en sus perfiles, lamentando profundamente su partida.
Honduras golpeada por la violencia
Este crimen se suma a la alarmante cifra de homicidios que azota al país. Según datos del Sistema Estadístico Policial en Línea (Sepol), hasta el 21 de mayo se registraban más de 835 muertes violentas en lo que va del año.
Las estadísticas indican que al menos un 80% de los crímenes fueron perpetrados con armas de fuego.
Hasta el momento se desconocen los móviles del ataque y no se reportan capturas. Las autoridades aseguran estar investigando el caso para dar con los responsables de este asesinato que enluta a otra familia hondureña.
La muerte de Mario Cálix es un nuevo reflejo de la creciente inseguridad que afecta a miles de jóvenes en el país.
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