Alexander Mendoza, conocido en el mundo del crimen como «El Porky«, se convirtió en uno de los fugitivos más buscados no solo en Honduras, sino también por agencias internacionales como el FBI, la DEA y el HSI.
Su historial delictivo y su participación en la Mara Salvatrucha (MS-13) lo convirtieron en un objetivo prioritario para las autoridades.
Mendoza se encontraba en la mira de la justicia por múltiples delitos, incluyendo crimen organizado, tráfico de drogas y armamento.
La Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, junto con otras agencias, presentó una acusación formal en su contra, imputándole cargos graves que lo vinculaban con actividades ilícitas a gran escala.
Su papel en la MS-13:
«El Porky» era considerado uno de los líderes más importantes de la MS-13 en Honduras. Se le acusaba de supervisar las operaciones de la pandilla en el país, así como de coordinar el envío de armas, drogas y dinero en efectivo a otras células de la MS-13 en Centroamérica y Estados Unidos.
Además, se le responsabilizaba de ordenar asesinatos de pandilleros rivales y de coordinar el tráfico de toneladas de cocaína hacia Estados Unidos.
Su relación con el juicio de JOH:
El nombre de Alexander Mendoza también salió a relucir durante el juicio contra el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández (JOH).
Una testigo, identificada como Andrea Santos y presunta pareja sentimental de Mendoza, declaró que «El Porky» era miembro activo de las maras y que incluso tuvo negocios con el exjefe de la Policía Nacional, Juan Carlos «El Tigre» Bonilla. Según Santos, Bonilla le enviaba armas a Mendoza.
Además, durante el juicio, el agente estadounidense Daniel McNamara reveló una supuesta intención del expresidente Hernández de asesinar a «El Porky».
También se presentaron conversaciones entre cabecillas de la MS-13 en 2015 donde se mencionaba a JOH y sus vínculos con el narcotráfico.
La fuga:
A pesar de su historial delictivo y las fuertes acusaciones en su contra, Alexander Mendoza logró protagonizar una espectacular fuga de los juzgados hondureños el 14 de febrero de 2020.
Un grupo de 20 personas fuertemente armadas irrumpió en el recinto judicial de El Progreso, donde Mendoza se encontraba en una audiencia, y asesinó a cuatro policías para liberar al líder de la MS-13.
La fuga de «El Porky» generó conmoción en Honduras y evidenció la capacidad de la MS-13 para operar con impunidad en el país.
Las autoridades iniciaron una intensa búsqueda para recapturar al peligroso criminal, quien se encontraba en la lista de los fugitivos más buscados por varias agencias internacionales.
La historia de Alexander Mendoza, alias «El Porky», es un claro ejemplo de la lucha de las autoridades contra el crimen organizado y el narcotráfico en Honduras.
Su captura y enjuiciamiento son fundamentales para desarticular las estructuras criminales que operan en el país y garantizar la seguridad de la población.
Si tiene información sobre el paradero de 'Alexander Mendoza'/'Porky', llame o envíe un texto a través de WhatsApp/Signal/Telegram al (+1-202-451-8122) o en #Honduras al (+504-8886-7166).
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