Yeimi Licona, reconocida en las redes sociales por su relación con el influencer japonés Shin Fujiyama, ha denunciado públicamente el maltrato recibido durante una consulta prenatal en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
A través de sus historias en Instagram, la joven hondureña compartió su experiencia, generando una ola de indignación entre sus seguidores y poniendo en evidencia las deficiencias del sistema de salud pública en el país.
Licona, quien se encuentra en la dulce espera de su primera hija, expresó su consternación por el trato recibido por parte del personal médico del IHSS.
“Qué horrible el trato en @ihss_hn y peor con las embarazadas”, escribió la influencer, quien señaló que desde el momento en que llegó al centro de salud fue atendida con desdén y falta de empatía.
La futura madre denunció que las enfermeras la trataron de manera grosera y alzada de voz, una situación que, según ella, es lamentable y común en los hospitales públicos hondureños.
“Las enfermeras te tratan de la peor manera y te gritan, qué triste lo que vive el pueblo a diario”, lamentó Licona.
La influencer hondureña también expresó su preocupación por la situación de otras personas que acuden al sistema de salud pública en busca de atención médica.
“No me imagino lo decepcionante, lo que ha de ser para las personas que realmente andan enfermas y las tratan de esa forma y aparte se van sin medicamento”, agregó.
Denuncian presunta negligencia médica y maltrato en atención a embarazada en IHSS
La denuncia de Yeimi Licona ha generado un amplio debate en las redes sociales sobre la calidad de los servicios de salud en Honduras y la necesidad de mejorar las condiciones en los hospitales públicos.
Muchos usuarios han expresado su solidaridad con la influencer y han compartido sus propias experiencias negativas en el sistema de salud.
Pese a esta experiencia negativa, Licona ha decidido continuar compartiendo su proceso de gestación con sus seguidores, demostrando una gran fortaleza y resiliencia.
Su denuncia, sin embargo, sirve como un llamado de atención a las autoridades competentes para que tomen medidas urgentes y mejoren la calidad de atención que se brinda a los hondureños en los centros de salud pública.
La historia de Yeimi Licona pone de manifiesto la necesidad de invertir en el sistema de salud hondureño, capacitar al personal médico y garantizar una atención digna y respetuosa para todos los pacientes, especialmente para las mujeres embarazadas y las personas más vulnerables.
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