Redacción. Dos hondureños han perdido la vida en su travesía hacia Estados Unidos, mientras migraban en busca de un futuro mejor.
Los trágicos hechos ocurrieron en territorio mexicano y han sido confirmados este domingo por el cónsul de Honduras en México, Héctor Amador, quien ofreció detalles de los incidentes.
Las víctimas fueron identificadas como Juan Carlos Arteaga Martínez, de 32 años, y Luis Eduardo Matute Murillo, cuyas muertes se produjeron en circunstancias aisladas pero igualmente trágicas.
Según el informe de Amador, Arteaga Martínez sufrió un accidente al caer del tren conocido como La Bestia, utilizado por miles de migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.
El incidente ocurrió en las cercanías de Apán, en el estado de Hidalgo, México, donde el hombre fue gravemente herido al sufrir la amputación de ambas piernas.
A pesar de ser atendido por elementos de la Policía de la región y ser trasladado rápidamente al Hospital General del Altiplano, Arteaga Martínez no logró sobrevivir.
El cónsul detalló que el hombre ingresó al centro médico a la 1:47 a.m., pero falleció dos horas después a causa de un paro respiratorio.
El otro hondureño, Luis Eduardo Matute Murillo, de 29 años, perdió la vida de una manera igualmente trágica mientras trabajaba en Chiapas.
Según las autoridades, Matute Murillo estaba realizando labores de balconería a más de tres metros de altura, cuando la extensión con la que trabajaba hizo contacto con un cable de alta tensión. La descarga eléctrica que sufrió le causó la muerte en el acto.
Ambos casos han conmocionado a la comunidad hondureña, que sigue enfrentando una ola de migración hacia el norte en busca de mejores condiciones de vida.
La migración irregular, a menudo peligrosa y llena de riesgos, continúa siendo una de las principales opciones para miles de hondureños que huyen de la pobreza y la violencia en su país.
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El cónsul Héctor Amador señaló que ya se están llevando a cabo los trámites necesarios para la repatriación de los cuerpos de ambos migrantes.
Los restos serán trasladados a Honduras por vía aérea, en un proceso que se espera se realice en los próximos días.
La noticia de las muertes de Arteaga Martínez y Matute Murillo pone de manifiesto los peligros que enfrentan miles de hondureños que, como ellos, arriesgan sus vidas en busca del «sueño americano».
A pesar de las dificultades y las tragedias que atraviesan durante su trayecto, muchos siguen viendo en Estados Unidos la única oportunidad de alcanzar una vida mejor.
Con el número de migrantes hondureños que pierden la vida en su intento por llegar al norte en aumento, organizaciones de derechos humanos y autoridades hondureñas continúan llamando la atención sobre la necesidad de buscar soluciones más humanas y seguras para quienes deciden emprender este peligroso viaje.