Estados Unidos ha desatado una nueva disputa comercial al imponer aranceles del 25% a productos importados de México y Canadá, y del 10% a los provenientes de China.
En respuesta, los tres países han anunciado medidas de represalia para proteger sus economías y sus intereses comerciales.
Según el decreto presidencial firmado por Donald Trump, las nuevas tarifas entrarán en vigor este martes.
La decisión ha generado reacciones inmediatas por parte de los gobiernos afectados, quienes han expresado su rechazo y anunciado contramedidas.
China: Insatisfacción y advertencia sobre cooperación bilateral
El último país en reaccionar fue China. Este domingo, Beijing expresó su «gran insatisfacción» con los aranceles y, a través de su ministerio de Comercio, anunció la implementación de «medidas correspondientes» para proteger sus derechos e intereses.
El ministerio de Relaciones Exteriores chino advirtió que estas tensiones comerciales afectarán inevitablemente la cooperación futura entre ambos países, incluyendo la lucha contra el narcotráfico.
Esta declaración hace referencia a los esfuerzos conjuntos entre EE. UU. y China para frenar el tráfico de fentanilo, un opioide sintético que ha causado estragos en la población estadounidense.
El comercio entre China y EE. UU. alcanzó aproximadamente 500 mil millones de euros en los primeros 11 meses de 2024. Sin embargo, la balanza comercial sigue siendo desfavorable para Washington, con un déficit de alrededor de 260 mil millones de euros, según cifras oficiales.
Canadá impone nuevos aranceles a productos estadounidenses
Canadá respondió rápidamente a las medidas de Trump. El sábado por la noche, el primer ministro saliente, Justin Trudeau, anunció la imposición de un arancel del 25% sobre productos estadounidenses, afectando mercancías por un valor total de 155 mil millones de dólares canadienses.
A partir del martes 4 de febrero, este arancel se aplicará inicialmente a productos por un valor de 30 mil millones de dólares, incluyendo bienes de consumo como cerveza, vino, bourbon, frutas y jugos.
Trudeau enfatizó que, en lugar de imponer sanciones, EE. UU. debería fortalecer su asociación con Canadá, recordando el apoyo brindado en momentos clave como la crisis de los rehenes en Irán, la guerra en Afganistán y desastres naturales como el huracán Katrina.
El mandatario canadiense también advirtió sobre las dificultades económicas que estas medidas traerán para los ciudadanos de ambos países, afectando los precios de bienes esenciales como la comida y la gasolina.
México se prepara para defender su economía
Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, destacó en un mensaje público que la economía mexicana es fuerte y no se siente aislada ante estas nuevas sanciones comerciales.
Si bien no mencionó explícitamente los aranceles, rechazó las acusaciones de Donald Trump sobre presuntos vínculos de su gobierno con el narcotráfico, calificándolas de «calumnias».
Sheinbaum anunció que su administración adoptará medidas tanto arancelarias como no arancelarias para defender los intereses de México, aunque no detalló cuáles serán ni cuándo entrarán en vigor.
Escalada en la guerra comercial
Las decisiones de Trump han provocado una escalada en las tensiones comerciales entre EE. UU. y algunos de sus principales socios comerciales.
La incertidumbre sobre el impacto de estas medidas en la economía global sigue creciendo, mientras los países afectados preparan sus respuestas para minimizar los efectos negativos en sus industrias y consumidores.