Un niño de apenas 18 meses sufrió quemaduras severas en diversas áreas de su cuerpo, luego que su padrastro le lanzara agua caliente.
Al parecer, la pareja actual de su madre le arrojó agua hirviendo, supuestamente de manera accidental, después de una acalorada discusión con la madre.
De acuerdo con las autoridades policiales, el hombre tenía la intención de arrojar agua caliente a la madre del niño, pero, por un giro del destino, el líquido caliente terminó salpicando al pequeño.
Las autoridades de Seguridad revelaron que su intervención se produjo 72 horas después del incidente, ya que la madre del menor se mostró reacia a presentar la denuncia.
Fue solo gracias a la valiente acción de la abuela del pequeño, que las autoridades fueron capaces de intervenir en un barrio de Cortés.
Luego de que la abuela del niño alzara su voz para denunciar la situación, un grupo de agentes policiales se dirigió al barrio para interpelar a la madre del pequeño, con el fin de que esta acudiera a la Fiscalía correspondiente.
No obstante, se determinó que no existían evidencias suficientes para afirmar que las quemaduras del niño fueron causadas intencionadamente, concluyendo que, en realidad, se trató de un desafortunado accidente.
De este modo, la madre recuperó su libertad, mientras que las autoridades trasladaron al niño afectado al Hospital Mario Catarino Rivas, en San Pedro Sula, Cortés.
A pesar de que habían pasado 72 horas desde que sufrió las graves quemaduras, el pequeño aún no había recibido atención médica en ningún centro de salud.
Al momento de su alta, el menor será entregado a su abuela, quien ha asumido la custodia tras presentar la denuncia correspondiente.
Las autoridades han anunciado que continuarán monitoreando el caso, que será llevado a la Fiscalía Especial de Protección a la Niñez y Adolescencia una vez que la Fiscalía de turno haya finalizado su investigación.