Tegucigalpa. El diputado Mauricio Castellanos negó las acusaciones de Fátima Mena, electa presidenta del Partido Salvador de Honduras sobre las afirmaciones que no podía optar al cargo «por ser mujer».
Castellanos considera la polémica como una campaña de difamación y calumnias en su contra.
A su vez, culpo a los medios de comunicación de dicha campaña «sucia», lo que deja entrever su intención de aludir la responsabilidad de sus actos.
«Estudié Derecho para un día poder defenderme en la vida y ante esta campaña para levantar perfil presidencial… en perjuicio de mi buen nombre, violentado mi derecho a réplica, sin derecho a ser escuchado», dijo.
El diputado en su oposición a la elección como presidenta de Mena durante la asamblea, afirma que sus palabras las malinterpretaron y manipularon los medios de comunicación.
«Por tanto, defendiendo con ello la libertad de expresión contra el abuso y libertinaje del mismo por parte de algunos medios, he tomado la decisión de emitir este comunicado pues se está dañando mi imagen con calumnias, difamaciones», indicó.
De acuerdo a Castellanos, los medios de comunicación emiten «mensaje de apología de odio, que son contentivos de delitos graves».
Alternancia de genero en cargos
De acuerdo al diputado Castellanos, su objeción se basó en principios legales y estatutarios que exigen la paridad y alternancia de género en los cargos electos.
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Aclara que su propuesta de elegir una nueva junta directiva completa para cumplir con estos principios, la «respalda el Tribunal de Honor del PSH«.
Para muchos, acusar a la prensa de sus declaraciones parece ser un acto de buscar culpables externos y desviar la responsabilidad de sus propias palabras.
Mientras la atención se centra en cómo se manejarán las diferencias internas en el PSH.