San Pedro Sula. Este miércoles desde tempranas horas el parque central de San Pedro Sula, norte de Honduras, se convirtió en un campo de batalla entre vendedores de la calle y autoridades policiales.
Las autoridades municipales colocaron barreras de metal en los alrededores del parque central y aseguraron que no querían a ningún comerciante en el lugar.
Por su parte, los vendedores pidieron que los dejaran trabajar ya que es el sustento de sus familias y se niegan rotundamente a salir del parque.
Con esta decisión de las autoridades de la alcaldía de San Pedro Sula, de desalojar a los comerciantes, al menos 50 vendedores se ven afectados.
El alcalde de San Pedro Sula, Roberto Contreras, condenó el acto violento entre comerciantes y policías, donde aseguró que un agente resultó herido tras el zafarrancho.
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«El parque no es negociable», enfatizó Contreras y dijo que no permitirá que nadie lo invada ya que le pertenece a los sampedranos.
Cabe mencionar que, durante el conflicto una mujer que, se encontraba protestando contra el desalojo de vendedores del parque, se desmayó por la tensión del momento.
La Municipalidad de San Pedro Sula cerró el parque central de la ciudad y negó la entrada a los vendedores ambulantes ya que según las autoridades, crean desorden.
De la misma manera, la alcaldía anunció que pretende instalar una biblioteca en el parque por lo que, convocó a la población a donar libros.