Tegucigalpa. La corrupción y el narcotráfico durante los últimos tres Gobiernos en Honduras hizo que el nuevo, que preside Xiomara Castro tuviera «un reto demasiado grande», según el empresario Amílcar Bulnes.
Entre 2010 y 2022 ocurrieron una serie de «eventos catastróficos» para el país, viendo los hondureños «cómo se resquebrajó el Estado de derecho», dijo Bulnes.
Agregó que «hubo un golpe de Estado en el 2009, pero después hubo otro golpe, cuando destituyeron la mitad de la Corte Suprema de Justicia».
Además, señaló que en los últimos tres Gobiernos nacionalistas, «las autoridades del más alto nivel de Honduras» estuvieron «metidas en temas de narcotráfico».
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Los problemas siguen igual o peor
Castro asumió el 27 de enero de 2002, y en su discurso de investidura anunció una «propuesta de refundación del Estado socialista y democrático».
«La catástrofe económica que recibo no tiene parangón en la historia del país, y su impacto en la vida de la gente se refleja por el aumento de 700 % de la deuda», dijo Castro.
Asimismo, agregó: «La pobreza se incrementó al 74 % para convertirnos en el país más pobre de América Latina», enfatizó la mandataria.
Un año después de haber asumido el poder, Castro ha cumplido con algunas promesas de campaña.
Sin embargo, para el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), le ha fallado a los hondureños porque flagelos como la pobreza, desempleo, mala salud y violencia, siguen igual o peor que antes.
Castro ha reiterado en su primer año de mandato que no le ha sido fácil gobernar por los múltiples problemas que heredó tras «doce años de dictadura».
Bulnes dijo que «el Gobierno actual tiene su propia forma de pensar, tiene sus propias ideas, no sé si bien claras, pero las tiene».
«Hay mucha improvisación, esta no ha sido la excepción», recalcó el reconocido empresario, quien considera que «un año es más que suficiente para comenzar a cumplir sus promesas».