San Pedro Sula. Una funeraria en San Pedro Sula, Cortés, ha llamado la atención recientemente por ofrecer un peculiar servicio: la contratación de «lloronas», personas que asisten a funerales para llorar por los difuntos, a petición de los familiares.
Este inusual servicio ha generado diversas reacciones en redes sociales.
El propietario de la funeraria La Orquídea, explicó que la idea surgió a partir de solicitudes de sus clientes, quienes querían que los velorios de sus seres queridos fueran más emotivos.
«Buscamos personas adecuadas para el servicio de ‘lloronas’. También ofrecemos otros detalles, como globos, para personalizar cada despedida», detalló en una entrevista con un medio local.
El dueño también reveló que las «lloronas» emplean métodos particulares para simular lágrimas.
«Cada persona lleva una pequeña bomba para ayudarse a llorar», agregó.
Este no es el único pedido inusual que ha recibido la funeraria. Hace unos meses, un cliente solicitó que se le cantaran 15 canciones en su propio funeral.
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«Compró su ataúd y pidió que se le cumpliera su deseo. Cuando falleció, fuimos y le cantamos», comentó el propietario.
El servicio de «lloronas» ha generado opiniones encontradas entre los hondureños.
Mientras algunos ven esta opción como una manera de honrar a sus seres queridos, otros consideran que fingir el dolor en un funeral no es apropiado, ya que se trata de un momento sagrado.
