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martes, julio 1, 2025

¿Confianza?

AUNQUE innecesario decirlo, ni modo, hay que apuntarlo, para que no quede duda alguna de la solvencia con que se escribe al formular estas inofensivas reflexiones, más con el espíritu de colaboración que con ánimo de reclamo. Ninguna otra columna de opinión en la prensa, como esta, ha defendido más a las consejeras del acoso de que han sido víctimas y del hostigamiento contra el CNE –que a ratos parecería esparcido con la nociva intención de torpedear las elecciones, ya que desbaratar el ente electoral equivaldría a destartalar el proceso eleccionario que rectora—en aras de la ruta democrática que el país merece.

Hemos insistido que no debe lastimarse –con inventos, ataques, engaños con que los mismos beneficiarios de las elecciones inundan el ambiente político– la confianza que la ciudadanía debe sentir por sus autoridades electorales. Solo que, la confianza que haya elecciones impecables, demanda que sean esas autoridades las primeras interesadas en dar muestra de ser merecedoras de confianza.

Pasan 3 meses y medio de incumplimiento de pago, por insumos y servicios adjudicados para las primarias, a proveedores que entregaron a tiempo y en debida forma, en penosa violación de obligaciones contractuales.

¿Qué tiene esto que ver con la confianza? Poca cosa, solo que, al no honrar la palabra empeñada en lo menos, ¿no creen que pone en entredicho toda la confiabilidad en lo demás? (Dizque no pagan, “porque los del TSC y la ATIC del MP, les secuestraron los documentos”; y así se acumulan las evasivas. (Como aquí todo es al molote para el “show”, ¿qué justificación hay de ir a secuestrar papeles de un CNE independiente, autónomo, no supeditado a ningún otro poder, cuando bien pudieron solicitar certificación de los documentos o llevarse fotocopias, para hacer su tal investigación, como hizo el TSC que trabaja con las fotocopias que sacaron?)

Sin embargo, ello no es impedimento tampoco. Como si un ente autónomo ocupa la venia de otro para el cumplimiento de sus atribuciones, elevan una consulta al TSC pretextando no contar con los “documentos originales”.

(¿Quizás para que le echen la culpa a la fiscalía de los atrasos?) Pero es que el articulo 125 de la citada Ley Orgánica del Presupuesto no exige documentos originales, sino “soporte de los documentos que dieron origen”, que es una cosa muy distinta. (Incluso, ese mismo artículo manda habilitar “documentos electrónicos como soporte de las transacciones”, para no equivocar la lectura, interpretando mal, que la ley exija “papeles originales”).

Si el TSC trabaja con fotocopias y testimonios, para efecto de realizar su fiscalización administrativa ¿qué impide al CNE sustentar sus pagos con la documentación de que dispone? ¿Es que no hay actas de recepción que acrediten en forma fehaciente lo entregado y recibido? ¿Contratos, comprobantes, registros digitales? ¿No hay actas del pleno consignando las adjudicaciones y pormenores, para respaldar el pago de lo que deben? (Artículo 19, último párrafo:

“El Consejo debe llevar copia en formato físico y digital de cada una de las actas de las sesiones del Pleno…”) ¿Y el CNE no es un ente autónomo e independiente que no ocupa permiso de autoridad externa para ejecutar su presupuesto, cumplir sus responsabilidades y honrar sus obligaciones? El mismo oficio del TSC respondiendo a la consulta, lo repite: “… los pagos por los servicios contratados corresponden a una decisión inherente a la administración interna del CNE, con asesoría de su auditor interno y de su Departamento Legal”.

¿Qué culpa tienen los que cumplieron cabalmente con sus obligaciones, de cualquier desbarajuste administrativo a lo interno de la institución, o de los molotes que se arman por intereses políticos? Algo más. Sobre las publicitadas anomalías del día de las primarias, sin ánimo de ahondar en lo que ya ha sido ventilado y debatido—incluyendo a los que constitucionalmente tienen el deber de mantenerse callados– hasta la saciedad.

Inmediatamente de ocurridos los percances, el CNE ¿no debió integrar una comisión interna propia, investigadora de los hechos –para indagar la naturaleza de cualquier incidencia sobre la que el órgano colegiado deba actuar– sin necesidad de mantenerse clavado a ninguna otra investigación? Tiene entre sus atribuciones legales, en los relativo a su “organización y funcionamiento”: Articulo 21, “(I)”: Investigar de oficio o a petición de partes, los hechos que consideren como infracciones a la ley y resolver de conformidad a sus atribuciones y competencias”.

Además, ¿a quién corresponde: (9)-Supervisar el funcionamiento de las dependencias del CNE”? Ya a las cansadas, aparece un cuadro de las entregas y de los supuestos «retrasos”. ¿Qué minuciosa averiguación hubo? A falta de indagación precisa con gusto les informamos que ese cuadro adolece de equivocaciones.

Por ejemplo, consigna como “retraso”, la entrega de unas papeletas que fueron asignadas el 11 de febrero, por “adendum”, (trabajo que las imprentas no licitaron originalmente por no echarse más carga encima—por lo apretado del calendario– pero terminaron aceptando como colaboración a los apuros del CNE) negociado directamente por la Unidad de Compras y Contrataciones Electorales, sin que ahí especificasen la fecha de entrega.

Así que, a falta de fecha, tomaron la del pliego de adjudicación de marzo. La imprenta –pese al atraso de varios días en la entrega de los artes– tuvo el trabajo elaborado al minuto exacto y en la fecha prevista, sin embargo, el enlace del CNE que tenían metido en el local supervisando el proceso a todas horas del día y la noche, aun cuando supo que estaba listo el encargo, –ya que eran papeletas especiales de autoridades de partido de un departamento occidental, dispusieron trasladarlas hasta que la otra imprenta entregara las boletas normales, para tenerlas al mismo tiempo y maquilar el conjunto– no ordenó que llegara el transporte a recogerlo, hasta unos días después.

(Por suerte esas papeletas llegaron a tiempo a su destino ya que las recibieron el 5 de marzo, con suficiente anticipación. (Allí tienen –informa el Sisimite—un oficio del TSC acreditando que la imprenta allá por Suyapa entregó todo a tiempo y en debida forma. -Asumimos que lo expuesto arriba, –interviene Winston—se hace con la sana intención que se corrija, se ordene y se organice, y que las cosas les salgan mejor.)

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