Es muy común ver a diario a niños de diferentes edades en los semáforos o puntos estratégicos de San Pedro Sula pidiendo o limpiando vidrios de vehículos.
Según datos de Comisión de Acción Social Menonita (CASM), la mayoría de estos niños provienen de los anillos de pobreza de la ciudad industrial, los llamados bordos.
A criterio de CASM, hasta el 2023 rondaban unas 22 mil familias, con una media de 5 integrantes, es decir 110,000 personas, al menos entre el 10 y 11 por ciento de la población residente en los bordos.
Ante el incremento de niños en la calle, el alcalde Roberto Contreras anunció que tomará medidas para combatir esta situación.
El edil sampedrano aseguró que no se seguirá permitiendo que menores de edad permanezcan en las calles en condición de mendicidad o que sean alquilados para ese fin.
«Nosotros hemos estado viendo lo que es el maltrato animal, ya lo logramos controlar», aseguró Contreras.
No obstante, «ahora estamos viendo que (…) las personas están explotando a los niños», por lo que «vamos a rescatar todos los niños que las personas estén utilizándolos para pedir en las calles», dijo Contreras.
Contreras cuestionó que mientras el Código del Trabajo prohíbe que un menor de 18 años trabaje en la empresa privada, a niños con edades de dos a seis años «sí se pueden estar explotando».
«Por tal razón San Pedro Sula dice no a la explotación infantil o mendicidad de los niños», indicó.
Señaló que incluso hay personas que viven en los bordos que alquilan a los menores. «Estamos haciendo un censo en este momento de las personas que están haciendo esto», informó.
Dijo que tampoco se permitirá que las personas que tengan niños parapléjicos los estén utilizando «a sol y a agua» para pedir, «los niños tienen que estar en la escuela, los niños tienen que ser cuidados por sus padres», puntualizó.
El rescate de los menores explotados y en mendicidad se está haciendo en conjunto con el Juzgado de Protección a Menores.
De acuerdo a la Ley de Policía y Convivencia Social, se prohíbe la mendicidad sin permiso municipal, el cual solo se concede por impedimento para trabajar.
También se prohíbe la mendicidad valiéndose de menores lisiados, paralíticos, ciegos, ancianos, enfermos o fingiendo una enfermedad o impedimento.
Los mendigos serán conducidos a un centro de beneficencia para disuadir esta conducta antisocial, según la Ley de Policía y Convivencia Social.
Grave situación
Desde el Gobierno, la designada presidencial, Doris Gutiérrez, calificó de “grave” la situación de niños trabajando en la calle.
“Solo juntos, Gobierno y sector privado, vamos a lograr disminuir esos niveles alarmantes de niños en la calle y niños que no van a las escuelas”, subrayó Gutiérrez.
El país requiere una “política integrada” por instituciones del Estado, de la sociedad civil y la empresa privada, señaló la alta funcionaria.
La niñez es “el presente y el futuro de Honduras, enfatizó Gutiérrez, quien instó a la población a unirse para eliminar el trabajo infantil.