El arzobispo emérito de Tegucigalpa Cardenal Rodríguez Maradiaga ha dicho que los sentimientos contra la vida dañan a largo plazo.
En la solemnidad de San Pedro y San Pablo, la Arquidiócesis de San Pedro Sula celebra a su santo patrono con la misa presidida por Su Eminencia Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, invitado por el arzobispo Monseñor Miguel Lenihan.
El Cardenal Rodríguez recordó que en 1994, celebró en la Arquidiócesis de San Pedro Sula y expresó su emoción para acompañar a la feligresía sampedrana por segunda vez en esta celebración.
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Asimismo, dijo que no se obsesionará por la violencia, “recordemos la violencia terrible que le toca vivir a San Pedro y Santos Pablo, es por eso que vamos a poner en las intenciones especiales, sobre todo la unidad”.
“Debemos buscar comunión y unidad en la familia, en la sociedad y en la Iglesia. De tal manera que unidos podamos alcanzar metas mayores” ha expresado el Cardenal hondureño.
Rodríguez, encargado de la Santa Eucaristía de esta solemnidad, dijo que se encomendarán a Dios la paz para erradicar toda violencia que se ha vivido en el departamento de Cortés y Honduras.
