Honduras – Un intenso operativo policial se llevó a cabo en varias ciudades de Honduras con el objetivo de capturar a los responsables del brutal asesinato de José Octavio Sosa Méndez, hermano del extraditable José Rafael Sosa Méndez, y sus once guardaespaldas.
Las autoridades lograron detener a ocho de los implicados en este múltiple homicidio, que conmocionó al país.
Según las investigaciones, las víctimas fueron secuestradas, torturadas y asesinadas por una banda criminal liderada por José Bernabé Acevedo, alias Berna, quien ya fue abatido en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad.
Los cuerpos de las víctimas fueron arrojados al río Ulúa, lo que ha dificultado las labores de búsqueda y recuperación.
Las autoridades han ampliado el número de imputados en este caso a 21, entre ellos exmiembros de la Policía Nacional y otros delincuentes de alta peligrosidad.
Los operativos se centraron en las ciudades de Olanchito, Tocoa, La Ceiba, Puerto Cortés y Baracoa, donde se presume que los sospechosos se ocultaban.
BARACOA, CORTES:
La @PoliciaHonduras realiza con otras Direcciones Especializadas un operativo de localización, búsqueda y captura de estructura criminal implicada en la desaparición de varias personas hace unos meses en el sector. Hasta el momento hay 8 capturados. Operación en… pic.twitter.com/lUYD3qvqTH— Gustavo Sanchez Velasquez (@hegusave) December 5, 2024
HORRENDO CASO
Las investigaciones han revelado que los secuestradores interceptaron a Sosa Méndez y su comitiva en los bajos de Baracoa el pasado 12 de junio.
Posteriormente, las víctimas fueron llevadas a un sector de la aldea Crique Las Marías, donde fueron sometidas a torturas antes de ser asesinadas.
El horrendo caso de 12 cadáveres en el río Ulúa, entre ellos, el hermano de un extraditable
La Policía Nacional ha asegurado que con la captura de estos implicados, el caso está prácticamente resuelto.
Sin embargo, las autoridades continúan trabajando para localizar los cuerpos de las víctimas y detener a los nueve fugitivos que aún están siendo buscados.
Este caso ha generado una gran conmoción en Honduras y ha puesto de manifiesto la gravedad de la crisis de violencia que enfrenta el país.
La sociedad hondureña exige a las autoridades que redoblen sus esfuerzos para combatir la delincuencia organizada y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
La captura de estos individuos es un paso importante en la lucha contra el crimen organizado en Honduras, pero aún queda mucho por hacer para erradicar la violencia y restaurar la paz en el país.