Por Jacobo Goldstein (JG) y Alberto García Marrder (AGM) para Diario “EL PAÍS”.
AGM: El presidente Joe Biden, a sus 82 años, planea reelegirse por otros cuatro más. Pero tiene mucho en su contra, aparte de la edad y sus tropiezos mentales. El presidente (“Speaker”) de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, acaba de anunciar el inicio de un juicio político (“impeachment”) contra Biden por su supuesta implicación en los inquietantes negocios de su hijo Hunter, en China y Ucrania.
AGM: ¿Cómo ves este intento de los republicanos a falta de poco más de un año para que Biden termine su mandato? ¿Qué posibilidades tiene, aparte de estropear la imagen del presidente, quien todavía sigue apoyando a su hijo?
JG: Todo es un verdadero juego político de ver cómo empañan o reducen la imagen de Biden y al mismo tiempo, buscan que no solo se esté comentando acerca de los cuatro diferentes juicios con 91 cargos que se le están llevando a Donald Trump en cuatro distintos tribunales, localizados en Nueva York, Washington D.C., el condado Fulton cerca de Atlanta (Georgia), y Florida.
AGM: Es sintomático lo que le pasó a Biden, en Hanoi (Vietnam), en su reciente gira asiática. En una rara rueda de prensa, su jefa de prensa (Karine Jean-Pierre) tuvo que interrumpirla a los 26 minutos, y cortarle el sonido, cuando Biden, falto de sueño, empezó a recordar, incoherentemente, las bravatas del actor John Wayne.
AGM: Si es reelegido en el 2024, tendríamos a un Biden hasta los 86 años. Eso es para pensarlo.
JG: Es cierto que en esa reunión con la prensa en Hanoi, Biden se veía sumamente cansado y se enredó vocalmente, agregándose a otras veces que le han pasado casos similares.
AGM: Biden es consciente y muchas veces trata las cosas con algo con humor. Su esposa Jill siempre lo vigila para ayudarlo. En Hanoi, no creo que le haya gustado al presidente cuando el poderoso líder vietnamita, Nguyen Phu-Trong, le dijo en el acto de bienvenida en el aeropuerto: “Se mira mejor que nunca, no pasan los años con usted, tiene un precioso pelo blanco”.
AGM: Cuando Biden sube las largas escalinatas de su avión presidencial, el “Air Force One”, los fotógrafos están alertas por si se tropieza, como ya ha sucedido antes.
JG: La prensa que lo cubre siempre ha estado vigilando todos sus pasos, tanto al hablar como caminar y no le perdonan un solo desliz, sin comentarlo públicamente.
JG: También quiero dejar constancia que, a mi juicio, la edad no debe ser el factor clave de la candidatura presidencial si el cerebro funciona bien y el cuerpo funciona debidamente. Bien puede un individuo ejercer inteligente y físicamente la Presidencia de la nación. Como ejemplo yo pongo el líder alemán Konrad Adenauer, que fue un excelente Canciller Federal de la República Federal, de la Alemania reunida (1949- 1963), cuando la Alemania comunista fue absorbida por la Alemania occidental-democrática.
AGM: Hay otro problema y bien puede terminar siendo el factor dominante de si buscar la Presidencia: su hijo Hunter Biden. La prensa norteamericana no entiende cómo Biden sigue protegiendo a su hijo Hunter, acusado de corrupción, de uso de drogas y abuso de poder en raras transacciones comerciales en Ucrania. Y lo hace desfilar junto a él en los actos oficiales.
JG: Sin lugar a dudas, el hijo ha sido el tremendo talón de Aquiles de Joe Biden, pues, sus múltiples líos de toda clase a lo largo de los años han causado un enorme daño político a su padre y le han constituido un eterno dolor de cabeza. Ahora los republicanos van a aprovechar a como sea posible lo que ha venido haciendo Hunter para así poder pasearse en su padre. Y no escatimarán esfuerzo alguno que puedan utilizar para que Donald Trump lo venza en las elecciones presidenciales del 2024.
AGM: Y si Donald Trump no se presenta debido a los cuatro juicios que tiene pendientes en el 2024 que van a interrumpir su campaña electoral, ¿quiénes serían los “tapados”? Te recuerdo Jacobo que, aunque sea declarado culpable y esté en la cárcel, Trump puede ser aún candidato presidencial.
JG: Estoy consciente de que Trump pueda salir electo aun estando encarcelado y seguramente al tomar posesión el 20 de enero del 2025, y si eso sucediera, lo primero que haría es utilizar el poder del presidente para perdonarse a sí mismo y así poder borrar para siempre cualquier récord criminal del que él previamente haya sido encontrado culpable.
AGM: Así es, pero te recuerdo Jacobo que solo en el juicio de Georgia no podrá auto perdonarse por ser estatal y no federal.
JG: Te sugiero que leas una tremenda columna de David Ignatius en “The Washington Post”, pidiendo que Biden renuncie a la reelección.
AGM: En el escenario político de Washington, que tú y yo conocemos bien por nuestros largos años de corresponsales en la Casa Banca, esa columna política en ese diario ha caído como una bomba y sus sacudidas aún se sienten: me refiero a esa columna de su escritor estrella, David Ignatius, pidiendo que tanto Biden por su edad, como su vicepresidente, Kamala Harris, no debieran presentarse a la reelección.
AGM: Ignatius ha sido en sus columnas anteriores muy elogioso con los logros de Biden en política exterior y era muy bien visto en la Casa Blanca. No le van perdonar su última columna… pero es un primer síntoma que la “prensa amiga” se puede echar atrás.
Lea También: Joe Biden dice que se reunirá con Xi Jinping en un “futuro cercano”