Tegucigalpa. Unos 2.500 policías y militares intervinieron este martes en la denominada cárcel de «máxima seguridad» de Ilama, Santa Bárbara, donde dos reos murieron y una veintena resultaron heridos en varios enfrentamientos registrados las últimas semanas.
«Con el desplazamiento de al menos 2.500 efectivos policiales, elementos militares, helicópteros, patrullas y camiones, se desarrolla la ‘Operación Refundación´ en el centro penitenciario de llama», indicó el Instituto Nacional Penitenciario (INP).
La viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, indicó que la intervención es parte del «Plan Refundación Penitenciaria».
Esta incluye un «sin número de actividades operativas tácticas» del INP, la Policía Nacional y «sus aliados».
«Después de la muerte violenta de un privado de libertad por arma de fuego en el centro penitenciario Ilama, inicia el Plan Refundación Penitenciaria».
«El desarme, bloqueos de comunicación y otras estrategias comenzaron ya», subrayó la funcionaria Villanueva.
El 18 de abril, Villanueva anunció un conjunto de medidas para poner orden en las cárceles del país que implican el bloqueo de llamadas de celulares.
Además, un desarme real de los presos y la clasificación de los reos por peligrosidad.
El Instituto Penitenciario señaló que la intervención en la cárcel se lleva a cabo luego de «semanas de planificación».
Las Fuerzas Armadas de Honduras participa en la "Operación Refundación Penitenciaria I" que se ejecuta en el Centro Penal de Ilama, Santa Bárbara en apoyo a la Comisión Interventora de Centros Penales, en el marco del Plan Nacional de Seguridad " Solución Contra El Crimen". pic.twitter.com/GmuVtA5Ne9
— Fuerzas Armadas de Honduras (@FFAAHN) May 23, 2023
De la misma manera, el objetivo es establecer «estrategias apegadas a la declaratoria de emergencia» del sistema carcelario».
En la operación participan efectivos de la Policía Nacional y elementos de las Fuerzas Armadas de Honduras, enfatizó el INP.
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Desde abril, al menos seis tiroteos o enfrentamientos se han registrado en las cárceles de Honduras. EFE