Se refiere al acorralamiento, persecución, acoso físico o psicológico al que someten, de forma continua, a una persona. Es un comportamiento totalmente intencional, que lleva el propósito de hacer sentir mal a alguien. Se hace uso de la fuerza, puede existir cierta ventaja social y puede haber un nivel de autoridad diferente entre los vinculados.
TIPOS DE BULLYING
Verbal: es el acoso más frecuente, se da con insultos, gritos y apodos ofensivos hacia la víctima. Su objetivo es atacar y demostrar que la víctima es distinta al resto, por lo que se afecta su autoestima.
Físico: es toda agresión que implique un contacto físico, como golpes, empujones que ejerce una o varias personas contra la víctima y de forma constante.
Psicológico: en la mayoría de ocasiones se manifiesta a espaldas de la víctima. Su objetivo es deshonrarla y evitar que se integre a algún grupo. Esta “no integración” de la víctima se detecta cuando se ha normalizado su aislamiento. Pero también se puede dar en presencia de la víctima, haciéndole sentir fuera de lugar, discriminada y ninguneada.
Cibernético: también llamado ciber-bullying, es el acoso que se da por las redes sociales, correos electrónicos e internet. Su objetivo es viralizar el daño y hacer que la víctima lo recuerde constantemente y que quede registrado en el tiempo. Hacen uso de grupos de Whatsapp, canales de Telegram, blogs, muros de confesión en donde publican contenido de manera anónima, etc.
Sexual: incluye acoso, inducción o abuso sexual o referencias malintencionadas a las partes íntimas del cuerpo de la víctima o también alguna conducta en contra de su orientación sexual.
Síntomas:
* Depresión, soledad, nerviosismo o ansiedad.
* Baja autoestima.
* Dolor de cabeza, dolor de estómago, cansancio o malos hábitos alimenticios.
* Faltar a la escuela, no estar a gusto en la escuela o tener un rendimiento más bajo que el que tenía antes.
* Conductas autodestructivas, como escaparse de la casa o hacerse daño a sí mismo.
* Pensamientos suicidas o intentos de suicidio.
* Lesiones sin explicación.
* Pérdida o daño en ropa, libros, dispositivos electrónicos o joyas/accesorios.
* Dificultad para dormir o pesadillas frecuentes.
* Pérdida abrupta de amigos o evitar situaciones sociales.
Soluciones:
* Detectar: por ejemplo, por medio de la observación.
* Saber qué preguntar en el día a día, por ejemplo, cuándo vamos por los niños a la escuela: ¿con quién jugaste hoy?, ¿qué te hizo sentir mal?, ¿alguien te hizo sentir inseguro?
* Saber escuchar y validar el sentimiento, hacerles sentir que es importante lo que cuentan.
* En algunas ocasiones es necesario garantizar la confidencialidad.
* Contrarrestar el impacto que genera en la autoestima.
* Hacer uso de afirmaciones positivas, para mantener el equilibrio en el auto concepto.
* En el aula promover el trabajo en equipo y buscar cosas en común entre los menores y no solo las diferencias (grado de compatibilidad).
* Mantener líneas de comunicación abiertas, enseñarles a los niños el protocolo que la escuela tiene para elevar las quejas por maltrato, por ejemplo, maestra guía, Consejería, Psicología, Dirección.
* Dar el ejemplo de cómo tratar con amabilidad y respeto, puede ser dramatizado o hacer un roll playing.
* Brindar estrategias para protegerse, saber qué hacer.
* Buscar apoyo de líderes positivos, pueden ser algunos compañeros que estén pendientes de los demás.
* La escuela debe brindar toda la información y el alumnado debe saber que es inadmisible un comportamiento de violencia.
