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domingo, mayo 11, 2025

(VIDEO) Personas forman largas filas para beber «agua bendita», pero no era lo que esperaban

Redacción. En la ciudad de Vrindavan, India, famosa por su profundo legado espiritual y la devoción hacia Krishna, un grupo de feligreses se congregó en el templo Shri Banke Bihari con la esperanza de vivir una experiencia sagrada.

Lo que esperaban como un acto de fe se convirtió en una sorpresa inesperada. Desde temprano, decenas de personas hicieron fila para recibir el Charan Amrit, el agua bendita que, según la tradición, fluye de las estatuas de Krishna.

Los devotos se alinearon frente a una escultura de elefante, de la que emanaba un flujo constante de agua, que muchos creían era sagrada.

Los fieles, impulsados por su devoción, esperaron pacientemente durante horas para beber el agua, que consideraban un símbolo de purificación y bendición.

Algunos la recogieron en recipientes, otros la usaron para refrescarse o bendecir a sus seres queridos.

La escena estaba impregnada de un profundo sentido de fe, donde la espiritualidad y el respeto por Krishna se unían a la creencia de que el líquido era un regalo divino.

La intervención de las autoridades del templo

Al notar la multitud frente a la escultura, las autoridades del templo decidieron investigar el origen del agua que atraía a tantos devotos.

Para sorpresa de todos, descubrieron que el líquido no era sagrado, sino simplemente la condensación del aire acondicionado del templo.

Ante esta revelación, emitieron un comunicado alertando a los fieles de que el agua no tenía propiedades divinas y pidiendo que dejaran de consumirla.

La decepción de los devotos

La noticia causó una gran desilusión entre los asistentes, muchos de los cuales expresaron su tristeza por el descubrimiento.

Un devoto comentó, según el portal NDTV: “Venimos con una fe profunda, y esta noticia nos rompe el corazón”.

La reacción de los fieles refleja la decepción y el impacto emocional que causó la revelación, ya que muchos creían que el agua era un vínculo directo con lo divino.

A pesar de las aclaraciones oficiales, algunos devotos siguieron bebiendo el agua, convencidos de su carácter sagrado y rechazando la explicación del aire acondicionado.

Esta persistencia muestra cómo, en ocasiones, la fe puede sobrepasar el entendimiento racional.

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Riesgos para la salud y advertencias sanitarias

Además de aclarar el origen del agua, las autoridades del templo y expertos locales advirtieron sobre los peligros de consumir este líquido.

Los sistemas de aire acondicionado, que no están diseñados para producir agua potable, pueden acumular bacterias y hongos en su interior, lo que presenta un serio riesgo para la salud.

Estas sustancias pueden provocar infecciones respiratorias y digestivas, especialmente si el agua no es tratada.

Lo que comenzó como una manifestación de fe se convirtió en un problema de salud pública, lo que llevó a las autoridades a redoblar sus esfuerzos para prevenir cualquier riesgo entre los devotos.

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