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jueves, abril 25, 2024

Repentinos fenómenos naturales

ERNESTO ALVARADO REINA

La mente humana ha logrado escalar por medio de la provechosa preparación académica, unida esta, con referentes alturas de investigación, dispuestas de trabajo, disciplina, estudio e ilustración, enfiladas hacia el mejoramiento consciente de impresionantes obras puestas al servicio de la humanidad.

El comportamiento terminante prescribe o señala, la utilidad de destacados o determinados medios, con vista a la búsqueda o realización de ciertos fines. La ley natural expresa las relaciones constantes ente los fenómenos. Según los filósofos Hans Kelsen, Paul Siebeck y otros célebres y catalogados autores de la investigación científica, seria y probada, una fórmula ideal justificada y demostrada consiste en sí encima por lo siguiente: “A determinadas condiciones, que en cierto respecto son iguales, vayan siempre unidas determinadas consecuencias que en otro cierto respecto también son iguales”. Tal es el caso de la ley física “el calor dilata los cuerpos”. Existe un lazo, ardid o nexo de causalidad. No sucede los mismo con las normas que pueden ser de cortesía, trato social o simplemente jurídicas, estas últimas que imponen deberes y confieren derechos. Pues bien, sentadas las deducciones anteriores, es indispensable referirnos a los fenómenos naturales que han golpeado fuertemente a todo el país. Varios huracanes, crecidas de ríos, inundaciones, tormentas tropicales y una considerable cantidad de malformaciones golpean cruel y de manera despegada, despiadada o tosca, lo ancho y extenso del territorio nacional. No se ha previsto por las autoridades un orden prioritario de obras de alivio de estas malformaciones, como ser puentes seguros, represas, canales de alivio y algunas otras de vital importancia en la contención. En realidad, los Gobiernos anteriores al existente, solo se dedicaron a expresar sus odiosas frases demagógicas o de vil engaño, sin realizar las obras necesarias de impedimento de probables inundaciones, vientos, rompimiento de operaciones y otros males o indisposiciones.

Mentir o adulterar sus acciones, fue una faena y ejercicio casi constante en los años anteriores al Gobierno de Xiomara Castro Sarmiento de Zelaya, salvo algunas excepciones. Los ulteriores resultados catastróficos este año 2022 saltan a la vista del pueblo hondureño.

El equipo de la administración o régimen de gestión de riesgos, tiene planificado llevar a cabo una cantidad de obras de promoción y prevención de la vida o integridad física de los hondureños y demás habitantes, para poner paz, aliviar relativamente o disminuir o precaver los constantes fenómenos naturales que azotan toda la nación.

Recordemos que es deber del Estado preservar el medio ambiente y conservar la salud, mediante normas técnicas que impidan los daños a la salud y bienestar de la ciudadanía.

La urgente generación de obras de infraestructura o la remodelación de las ya existentes, son acciones de alto patriotismo y de comprobado fomento de fervor, dignidad y bienestar por entero.

Todo sea por la patria, el desarrollo y la cultura.

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