Puerto Príncipe, Haití – Una nueva ola de violencia ha sacudido a Haití, dejando un trágico saldo de al menos 184 muertos en la capital, Puerto Príncipe.
Estos enfrentamientos, ocurridos durante el fin de semana del 7 y 8 de diciembre, fueron orquestados por un poderoso líder pandillero, según informó la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La ONG haitiana Comité por la Paz y el Desarrollo (CPD) reveló que el líder pandillero Micanord ordenó la ejecución de estas personas, convencido de que habían provocado la enfermedad de su hijo a través de ritos vudú.
Los esbirros de Micanord perpetraron una cacería contra ancianos y adeptos del vudú en el barrio de Cité Soleil, asesinándolos y quemando sus cuerpos.
La coalición pandillera Viv Ansanm, a la que pertenece Micanord, ha sido señalada como responsable de una escalada de violencia en Haití desde su formación en 2023.
Esta alianza de pandillas enemigas ha llevado a cabo múltiples ataques contra comunidades, provocando el desplazamiento de miles de personas.
En octubre pasado, más de 4,200 habitantes de Solino se vieron obligados a abandonar sus hogares debido a la violencia.
La impunidad y la debilidad del Estado haitiano han permitido que las pandillas se fortalezcan y expandan su control territorial.
En febrero de 2024, Viv Ansanm perpetró una serie de ataques contra instalaciones gubernamentales, lo que demuestra su capacidad para desafiar la autoridad estatal.
Las autoridades haitianas han prometido tomar medidas para detener a los responsables de esta masacre y restaurar el orden en el país.
Sin embargo, la crisis humanitaria y de seguridad en Haití sigue empeorando, y la población civil se encuentra cada vez más vulnerable ante la violencia de las pandillas.
El director del CPD, Fritznel Pierre, advirtió que el balance de víctimas podría ser aún mayor, ya que los grupos criminales impiden el acceso a las zonas afectadas, dificultando las labores de rescate y asistencia humanitaria.
Esta nueva masacre pone de manifiesto la urgencia de una intervención internacional para estabilizar Haití y proteger a su población civil.
La comunidad internacional debe unirse para brindar el apoyo necesario al pueblo haitiano y poner fin a la violencia que azota al país.
Un avión de Spirit Airlines recibe disparos mientras sobrevolaba Puerto Príncipe, Haití