Omoa. Un bombero, cuya identidad no ha sido revelada, enfrenta graves acusaciones de abuso sexual contra una niña de 12 años con capacidades especiales. El incidente habría ocurrido dentro de una ambulancia del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Honduras, durante un traslado desde una clínica municipal hasta su residencia en Omoa, Cortés.
Según la denuncia presentada ante la Dirección Nacional de Investigaciones (DPI), el bombero presuntamente aprovechó la situación de vulnerabilidad de la menor para cometer el abuso.
El capitán del cuerpo de bomberos, Óscar Silva, declaró a los medios locales que la denuncia incluye acusaciones de tocamientos inapropiados y la toma de fotografías por parte del bombero.
«Llamaron para el traslado, llegaron los bomberos a traer a la niña, se metió a la ambulancia y parece que fue ahí que el bombero la tocó y le tomó las fotos», explicó el capitán Silva.
Sin embargo, el acusado, en declaraciones a medios locales, niega las acusaciones de violación, admitiendo únicamente haber tomado fotografías y realizado tocamientos.
«El bombero no está metido en la denuncia esa de la violación, está metido sí en la fotografía y en la tocazón (…) sí la tocó», afirmó.
El capitán Silva enfatizó que el bombero ha sido dado de baja del cuerpo y que la investigación ahora está en manos del Ministerio Público.
«El muchacho ya no está con nosotros, él tiene que aclarar las cosas porque, que cometió el error, lo cometió; pero hay que actuar con inteligencia porque la niña dijo que el violador es otra persona, no el bombero, él esta acusado por que le tomó las fotos y la tocó», puntualizó.
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Penas por abuso sexual en Honduras
El Código Penal de Honduras establece penas de prisión de 9 a 13 años para el delito de violación.
Además de la prohibición de residencia y aproximación a la víctima por el doble del tiempo de la pena de prisión. Si la víctima es menor de 14 años, la pena se incrementa en un tercio.