“A nadie le gusta equivocarse, pero es gracias a los errores que podemos aprender a ser mejores”, así quiso disculparse el delantero, Romell Quioto, tras salir expulsado la noche del domingo con su club el Montreal Impact.
Había anotado al minuto 5 el 1-0 en el juego, pero a los 16 fue expulsado al propinar un puñetazo a un adversario. El cuadro canadiense terminó perdió 4-1 ante Philadelphia Union, lo que irritó al entrenador, Thierry Henry.